Para lograr un pecho tonificado y hermoso no hay que pasar por el quirófano. Podemos conseguirlo siguiendo los cuidados adecuados y con mucha constancia.
Lo primero para asegurar unos pechos firmes es mantener la piel suave y elástica.
Para ello, elige aceites que contengan aguacate, germen de trigo o avena. El mejor momento para aplicarlos es después del baño antes de acostarte. Si buscas una crema que te ayude a mantener todo en “su sitio”, entonces debes fijarte que ésta contenga activos que mejoren la microcirculación, que sean astringentes (como el castaño de indias o el hamamelis), así como proteínas que retensen la piel, como la soja y trigo, por ejemplo.
La flacidez y la pérdida de densidad de la piel son los peores enemigos de un pecho hermoso. Para combatir esto, debemos optar por una crema que favorezca la formación de colágeno y elastina. Para potenciar sus efectos, estas cremas pueden también incluir aceites esenciales que aportan un extra de hidratación, al igual que vitaminas y aminoácidos.
