En el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), pasan los años y las personas, pero la historia se repite. Los hechos del pasado domingo, con Miguel Vargas y el expresidente Hipólito Mejía, como protagonistas, traen a la memoria las divisiones de ese partido a lo largo de sus 74 años de fundación y 51 de su llegada al país. Las crisis han sido permanentes y de las divisiones han nacido cuatro partidos.
“Árbol que crece torcido, jamás su rama endereza”, con esa frase, Juan Bosch, fundador del PRD, describía los constantes problemas en la organización, en uno de los folletos que escribió para enseñar disciplina política en el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), entidad que fundó producto de la primera gran división del partido del jacho.
El peso de las siglas
Desde la caída de la tiranía de Trujillo, las insignias del partido opositor gravitan en el escenario político nacional y su historial de divisiones ha demostrado que quien se queda con las siglas PRD, la bandera blanca y el jacho como logo, garantiza éxito político.
La prueba es que de los cuatro partidos que han sido fundados por experredeístas, solo el PLD se ha convertido en una fuerza política importante. El Partido Revolucionario Social Demócrata (PRSD), de Hatuey de Capns; el Partido Revolucionario Independiente (PRI) y el Bloque Institucional Socialdemócrata (BIS), fundados en medio de crisis por Jacobo Majluta y José Francisco Peña Gómez, respectivamente, se han mantenido como minoritarios y casi siempre han participado en las elecciones como aliados.
Quizás es el conocimiento de esa realidad lo que ha prolongado la guerra por el control del PRD entre Vargas y Mejía y que ninguno haya decidido abandonar ese partido para formar parcela aparte, como ha ocurrido en la mayoría de las crisis. Las batallas legales, hasta ahora, las ha ganado Vargas, pero la entrada al local por Mejía en señal de triunfo, demuestran que a pesar de su expulsión tiene fuerza a lo interno.
En el 1973, se divide PRD y nace PLD
A pesar que desde su fundación el PRD ha estado en conflictos, la primera gran división fue en el 1973, cuando las diferencias entre Juan Bosch y Peña Gómez empujaron al primero a fundar el PLD y una cantidad importante de connotados dirigentes del PRD siguió los pasos del profesor. Entonces, Peña Gómez, quien se erigió como líder del PRD quedó al frente de esa organización. En los años siguientes a la ruptura Bosch-Peña Gómez, los problemas en ese partido continuaron y en el 1977, fue necesario otorgar la presidencia del PRD a Jorge Blanco para garantizar la unidad luego de la crisis por la convención.
Concordazo marcó para siempre al PRD
La séptima convención del PRD se efectuó en el 1985 y para ese momento había surgido una lucha de tendencias. De un lado estaban Jorge Blanco y Peña Gómez y por el otro, Jacobo Majluta. Durante la convención se produjo un tiroteo en el centro de cómputos que dejó un muerto y varios heridos. El hecho tuvo lugar en el hotel Dominican Concorde, hoy Dominican Fiesta y pasó a la historia como el “Concordazo”. Peña y Majluta marcaron la división. Esa situación selló la segunda división importante que dio origen al PRI de Jacobo Majluta y al BIS de Peña Gómez que siguió en el PRD.
En 2004, la reelección dividió al PRD
En las elecciones del 2004, cuando Mejía compitió con Leonel Fernández por la Presidencia de la República, el PRD sufrió su mas reciente división, cuando Hatuey De Camps, basado en sus principios de rechazo a la reelección presidencial no respaldó la candidatura de Mejía y, por el contrario, se convirtió en uno de sus mayores críticos en pleno proceso electoral. De Camps fue expulsado de la organización y fundó el Partido Revolucionario Social Demócrata (PRSD), e incluso se quedó con la Casa Nacional que era uno de los símbolos del perredeísmo. Previo a esa división, en el 1998, la victoria en las elecciones congresuales y municipales del PRD fue contundente, pero el éxito estuvo precedido por fuertes diferencias por la candidatura a síndico por la capital, especialmente entre Julio Maríñez, Eligio Jáquez y Miguel Vargas, que llevaron a Peña Gómez a lanzarse al cargo para evitar mayores divisiones. Peña murió faltando seis días para las elecciones. Desde el 2004, Mejía ha estado presente en las crisis que han afectado al PRD.
Crisis internas han impedido PRD gane
Para algunos analistas políticos y así lo entiende el sector de Mejía, las diferencias entre el expresidente y Miguel Vargas fueron de las causas de la derrota electoral que sufrió el PRD en las elecciones del 20 de mayo del 2012. El futuro político de ese partido luce poco promisorio para las elecciones del 2016, en cuyo año se escogerá al presidente de la República, senadores, diputados, síndicos y regidores. La lucha de ahora en el PRD es, sin duda, porque las facciones están pensando en el 2016 y por eso quieren el control para determinar las candidaturas de los distintos cargos.
Las diferencias en el PRD lo han mantenido por muchos años fuera del poder a pesar de ser la organización política más vieja del sistema de partidos con 74 años cumplidos, de los que 51 ha estado en el país. En más de medio siglo en la nación solo ha logrado la Presidencia de la República en cuatro ocasiones. En el 1962, con Bosch 1978, con Antonio Guzmán, en el 1982, Jorge Blanco. En el año 2000 asumió el poder, por cuarta vez, con Hipólito Mejía a la cabeza.
