Santiago. La secuela de lluvia dejada por la tormenta Bertha ni siquiera se sintió en Santiago y comunidades del Cibao y la sequía redujo a 315.50 la cota de la presa de Tavera.La falta del líquido no solo ha agudizado la crisis del servicio en Santiago y Moca, sino en 19 comunidades cercanas a dicho embalse que han sido sometidas a un plan de regularización.
Cristino Pérez, propietario de un pequeño restaurante ubicado a escasa distancia de la presa, asegura que en comunidades como La Gina y El Mamey, a veces duran hasta una semana sin recibir agua potable.
“Aquí tenemos 19 comunidades en total que sufren los embates de la escasez de agua, a pesar de que tenemos la presa de Tavera al lado”, refirió Pérez.
En tanto, que las autoridades de la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) y Coramoca, explicaron que las precipitaciones resultaron insignificantes para mejorar las condiciones de los embalses en Santiago y otras zonas del Cibao.
Precisaron que de continuar la sequía tendrán que tomar nuevas medidas, lo que afectaría aún más a la población.
De acuerdo a las autoridades de Coraasan, la sequía está provocando que la presa de Tavera baje diariamente 20 centímetros, mientras que comunidades como Baitoa reclaman la construcción de un acueducto debido a la precariedad del servicio.
Confían que con la nueva vaguada que se avecina puedan registrarse lluvia en estas zonas que permitan llenar los embalses para abastecer la demanda actual que es de 134 millones de galones por día. Las presas de Tavera y Bao abastecen, también la comunidad de Moca.
En sitio como el ensanche Libertad, la comunidad instaló una llave común donde hacen filas en espera de agua.
Los moradores de ese sector dicen que además del pobre servicio, la tarifa es muy alta. Mientras en los apartamentos han optado por instalar más tinacos y las llamadas bombas “ladronas”, para abastecerse debido a que el agua llega con poca presión.
