En el artículo anterior, reseñamos los esfuerzos del Estado dominicano encaminados a ampliar el acceso y a fortalecer los servicios de la Primera Infancia y el Nivel Inicial (niños de 0 a 6 años).Reconocemos la creación o adecuación de espacios más idóneos para la protección y atención integral de estos niños, así como la ampliación de servicios a sus familias y comunidades. Cabe destacar también, los esfuerzos realizados para la titulación del personal docente especializado en esos niveles. Ahora bien, pese a los procesos de formación a que han sido expuestos estos docentes, su ejercicio cotidiano evidencia oportunidades de mejora para una práctica de calidad. Concretemos nuestros comentarios al Nivel Inicial, pues en este ámbito tenemos más oportunidad de observación y evaluación crítica.
Aunque, a nivel general se observa la implementación del Modelo Pedagógico en la organización del ambiente, el equipamiento, la distribución del mobiliario y el tipo de recursos utilizados en las aulas, así como en el desarrollo del horario de actividades, respetando cada uno de los momentos de la rutina diaria, los docentes necesitan seguir profundizando en los componentes curriculares, en la comprensión de los contenidos y los principios del Nivel consignados en el Diseño Curricular.
El Nivel Inicial cuenta con un Curriculum basado en competencias, que requiere de docentes capacitados, creativos, con amplios conocimientos de las etapas de desarrollo del niño, capaces de seguir aprendiendo para guiar los procesos de manera autónoma. Algunos docentes muestran debilidad en la comprensión de los contenidos curriculares con las competencias fundamentales y las estrategias de planificación.
Además, se observan debilidades en la concepción del trabajo curricular de acuerdo a criterios de integración y globalidad, ya que se trabajan contenidos de manera desarticulada y descontextualizada, y prácticas que no se corresponden con el Modelo y los principios del Nivel. Es frecuente observar prácticas de adquisición de la Lengua y la Matemática que colocan el énfasis en la realización de trazos, vocales, letras y números en los cuadernos de manera memorística y repetitiva obviando la intención comunicativa de la Lengua.
Los desafíos de capacitación de los docentes del Nivel que nos plantea esta realidad pudieran estar asociados, entre otros aspectos, a la formación inicial recibida y a los procesos de evaluación y retroalimentación del sistema que aún son muy débiles en este contexto educativo.
