Problemas en el hombro proliferan entre atletas

Las lesiones en el hombro es otro de los males que también han afectado la productividad de los deportistas en los últimos años y que los ha llevado a estar fuera de competencia por espacio de hasta diez meses.

Las lesiones en el hombro es otro de los males que también han afectado la productividad de los deportistas en los últimos años y que los ha llevado a estar fuera de competencia por espacio de hasta diez meses.El lanzador de los Yankees de Nueva York, Michael Pineda, representa el caso más reciente. El dominicano se perderá el resto de la temporada a causa de un desgarro en el ligamento glenoideo de su hombro derecho.

Para el doctor Luis Rodolfo Bergés Mejía, fisioterapeuta de la Clínica Altagracia, del ensanche Ozama, este tipo de lesión es recurrente en deportistas, especialmente en el béisbol, baloncesto y fútbol americano debido al constante movimiento al que estos se someten con sus brazos.

“El hombro es la única articulación que tiene mayor movimiento que otra parte del cuerpo”, indicó Bergés Mejía. “Por esa característica de movilidad tan profunda y tan amplia, cualquier lesión da como resultado un tiempo largo. Si hay una lesión en la cavidad glenoidea, la puede haber en el manguito rotador o puede haber de la porción corta o larga del disco. Todo eso tiene que ver con los movimientos de lanzamientos de un pitcher”, agregó.

El galeno manifestó que el tiempo de movilización del hombro, dependerá del nivel de grado de la lesión (si es grave, superficial o profunda), aparte del manejo que este tipo de problema pueda tener.

“Algunas veces, si se les da un manejo inadecuado, el pronóstico será reservado”, manifestó Bergés Mejía.

¿Por qué reservado?

Sostuvo que un lanzador tiene que hacer diferentes movimientos al momento de realizar envío de la pelota. En esta parte, un número de músculos se conjugan y se produce una sincronización lo que hace que un lanzamiento sea o no efectivo.

Contrario a una lesión en la rodilla, en el hombro es más vacularizada (vasos sangineos irrigados). “En la medida en que nos distanciamos de la parte alta de nuestro organismo, la capacidad vasculatoria va disminuyendo, o sea, de las arterias y las venas. A pesar de eso, hay que entender que la rodilla también aguanta peso, diferente al hombro que no la aguanta”, expresó el veterano fisioterapeuta.

Pineda se va a tener que someter a una cirugía en el hombro y perderse toda la temporada regular sin ni siquiera haber debutado oficialmente con los Bombarderos de El Bronx, lo que cayó como una bomba en los predios del equipo. Más que caer mal, fue una noticia devastadora.

Sostiene que en una lesión de este tipo se involucra una serie de componentes en el atleta, entre los que se encuentran el temperamento que este pueda tener en cuanto a cómo manejar su estado emocional y de ansiedad.

“La frustración es otro elemento que puede influir en este tipo de comportamiento. Ese es uno de los grandes problemas que presenta un atleta al momento de detectársele una lesión en uno de sus hombros. Basta con solo preguntarle a Michael Pineda de cómo está su estado emocional en la actualidad. La respuesta no será la mejor, porque no logró su objetivo este año”, expuso el galeno.

La rehabilitación

Sostiene que el proceso de rehabilitación en un atleta, en el caso de Pineda, debe llevarse en función al tipo de manejo quirúrgico al que fue sometido.

Asimismo, a la condición de la lesión propiamente dicha que será la que determinará el tiempo que durará en recuperarse. “Por lo regular, el tiempo de recuperación de ese atleta es largo. Primero hay que rehabilitar su movilidad, proceso que se lleva alrededor de seis semanas. Luego hay que fortalecer los músculos con el objetivo de que vuelva a ser el lanzador que era anteriormente. La confianza es otra parte esencial. Esa frustración que tuvo en ese momento desaparecerá inmediatamente”, agregó el especialista.

Sostuvo que hay deportistas que no siguen siendo la misma persona luego de una lesión, debido al temor de tener un revés nuevamente.

Ante esa situación, Bergés Mejía expresa que vienen una serie de interrogantes, entres las que se citan ¿Puedo quedar bien? ¿Puedo lanzar? ¿Puedo correr?
“Esas son de las muchas cosas que el terapeuta tiene que trabajar y para eso, cuando se trata de un deportista de una liga de esa naturaleza, no solo le buscan al terapeuta, sino a la persona que tiene que ver con la parte mental con el objetivo de ayudarlo. Eso lo estimula. Si solo te quedas en trabajar la parte física y no manejas la parte mental, no hay solución a ese caso”, dice.

La opinión de Figueroa

De su lado, el doctor Víctor Figueroa, especialista de Medicina Física y Rehabilitación en el Deporte, define el hombro como una estructura muy especial del cuerpo humano.

“No es una articulación, como en la cadera que se encaja un hueso dentro de otro”, expuso. “El hombro está prácticamente en el aire para hacer todo los giros necesarios al momento de realizar un envío. En un lanzador, el hombro no está hecho para tirar por encima de la cabeza. Cuando esto sucede, las estructuras rozan entre sí y va creando un proceso inflamatorio en lo que se llama el manguito rotador”, agregó.

Pineda tuvo marca de 9-10 con efectividad de 3.74 para los débiles Marineros en su temporada de novato.

Cada deporte tiene su tipo de lesión

Mejía sostiene que cada deporte tiene su tipo de lesión. Indica que el que juega fútbol, por lo general, la lesión será en la rodilla, pero el que acciona en el fútbol americano, además de la rodilla, puede ser en los hombros o en la cabeza. Sin embargo, el que juega baloncesto, la lesión, por lo general, será en el hombro al momento de la caída.

“Ahí está el caso de Al Horford (Hawks de Atlanta), quien   tuvo un desgarro muscular en el hombro izquierdo. Su proceso de recuperación fue muy arduo y pudo regresar a tiempo al juego, aunque no como en realidad se esperaba, a pesar de los tres meses que se le dio para su recuperación”, indicó el experimentado ortopedista. Expresa que el regreso de Horford está determinada por otro componente importante: la velocidad. “A mayor grado de velocidad, implicará un alto grado de impacto y de agresión hacia la lesión”, expuso el doctor Luis Rodolfo Bergés Mejía, quien fuera profesor de ortopedia de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) por 33 años.

El labrum glenoideo es un anillo de tejido fibroso que se adjunta al borde de la glenoideas (o glena) (depresión de la escápula del hombro donde la cabeza del húmero se asienta). La función del labrum glenoideo es la de aumentar la profundidad de la cavidad del hombro creando así una estabilidad mayor en la articulación de hombro.

La velocidad en un pitcher que viene de una cirugía de uno de sus hombros es distinta a la que tenía”.

El tiempo de movilización del hombro de Michael Pineda dependerá del nivel de grado de la lesión”.
Luis Rodolfo Bergés Mejía
Ortopedista

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