“La vida y suerte de mi familia cambió cuando los médicos me dijeron que mi hija de 4 años tenía cáncer y que podía morir y que sólo Dios podría hacer la obra”.
Virgen Rosa Merán se refiere, con emoción, al caso de su hija Melissa, una pequeña de ocho años que se zafó de las garras de un cáncer linfático. Testifica que no perdió la fe y que buscó ayuda médica en el hospital infantil Robert Reid Cabral, donde operaron a la niña y luego la sometieron a quimioterapia.
Este es uno de los testimonios que dieron a conocer decenas de personas sobrevivientes de cáncer, durante un encuentro realizado por el Programa Especial de Soporte contra el Cáncer, del Programa de Medicamentos Esenciales-Central de Apoyo Logístico (Promese/Cal), que suministra el tratamiento a personas afectadas del mal.
La directora de Promese, Elena Fernández, dijo que cada mes reciben 40 nuevos casos de personas con cáncer, siendo los más comunes el de mama, cérvicouterino, de ovario, vulva y endometrio. Desde el año 2006, cuando inició el programa de soporte, se han beneficiado 1,663 pacientes, de los cuales 761 fueron curados, 174 fallecieron y 611 quedan en tratamiento.
Entre los beneficiados figuran 1,256 mujeres y 407 son niños, que reciben los fármacos en los hospitales en los que Promese invierte cada mes 700 mil pesos.
