Santiago. La mejoría de los embalses Tavera-Bao no han logrado disminuir las quejas de los afectados por la crisis en el suministro de agua potable.La Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) atribuye el problema a una bomba que se dañó recientemente y que para repararla tendrán que esperar al menos dos semanas. Con las lluvias del fin de semana, de 318.80 metros cúbicos sobre el nivel del mar que se encontraba, el nivel de la presa estaba ayer en 319 metros cúbicos.
Las comunidades más afectadas son las de la parte Norte y la zona Sur, donde se han registrado varias protestas en demanda del vital líquido. Los daños en la bomba han causado una reducción de 10 millones de galones por día.
“La estamos arreglando, pero fuera del país y para eso faltan dos semanas”, explicó Héctor Jáquez, director de Operaciones de Coraasan, al ser entrevistado por elCaribe. Descartó que la crisis obedezca a problemas con los embalses.
El funcionario dijo que aunque lentamente, Tavera sigue subiendo.
