El director del Darío Contreras lamentó la valoración que dieron las autoridades a la propuesta de restringir la venta de bebidas alcohólicas el fin de año para evitar más muertes. Héctor Quezada dijo que el hecho de que sea una época de “fiesta y gozadera” no implica que también sea un período de muertes y descontrol, donde los accidentes de tránsito que llegan a los hospitales están ligados al consumo excesivo de alcohol.
Explicó que la sugerencia fue hecha por directores de otros centros de salud durante una reunión realizada la semana pasada, donde se planteó la necesidad de que las autoridades limiten la venta de bebidas alcohólicas durante las fiestas de fin de año para demostrar que cuando la gente maneja embriagado se registran más accidentes de tránsito. La tregua permitiría también hacer una comparación con las muertes reportadas en Nochebuena y Navidad. La reacción del ministro de Interior y Policía, José Ramón Fadul, a la preocupación de los directores de hospitales fue que se mantendrá la liberación de horario para el expendio de bebidas hasta el 8 de enero. “Este es un país alegre y las Navidades son fiestas, lo que hay que hacerlo es con control”, adujo el funcionario. En ese sentido, Quezada sostuvo que la muerte de una persona vale más que toda opinión y que no se puede hablar de educación en un pueblo que carece de ella. Dijo que los pobres son los que más beben en las fiestas de fin de año y son los que generan los casos que son atendidos en el Darío Contreras y otros hospitales, por lo que espera sea analizada la sugerencia y se revise también la disposición que mantiene sin límite temporalmente el horario de la venta de bebidas alcohólicas, ya que las autoridades no pueden dedicarse a contar muertos todos los años. El COE reportó un total de 24 muertes y 257 afectados el 24 y 25 de este mes.
