Santiago. Transitar por los once kilómetros de carretera en el trayecto Santiago-Licey se ha convertido en una verdadera odisea, debido al deterioro de la vía.La situación de esta carretera ha empeorado con el largo tiempo sin darle mantenimiento y a las lluvias caídas en los últimos días, lo que la ha dejado prácticamente intransitable. Tanto choferes de las rutas de concho como de vehículos privados muestran sus quejas y cuestionan que ni la alcaldía de Santiago, ni la de Licey al Medio le den mantenimiento.
Las autoridades de ambas alcaldías alegan que la falta de recursos económicos impiden intervenirla. Aunque por la carretera Duarte circulan las guaguas que llegan desde San Francisco de Macorís, Salcedo, Moca y de otras comunidades del Nordeste, el pasado gobierno solo dejó terminados tres kilómetros de calles, desde la rotonda Benito Juárez hasta Don Lindo.
En menos de tres años se han registrado unas diez muertes por accidente al caer en las zanjas laterales, la mayoría motoristas atropellados por vehículos pesados al esquivar los hoyos. La alcaldía de Licey solo ha tapado algunos hoyos, los que a los pocos días vuelven a formarse. La esperanza de los liceyanos está centrada en que sea intervenida con los trabajos de construcción de la avenida Circunvalación Norte que atraviesa el municipio desde Las Palomas hasta Don Pedro. Otro de los males que afectan a ese municipio es la falta de un sistema de alcantarillado y cloacal.
