Santiago.-En medio de peticiones de que sea canonizado, fueron sepultados en la cripta de los obispos de la catedral Santiago Apóstol, los restos del arzobispo emérito Juan Antonio Flores Santana.
Durante la misa oficiada por el arzobispo Ramón Benito de la Rosa y Carpio y donde participaron varios de los obispos que integran la Conferencia del Episcopado Dominicano, destacaron la fecunda labor pastoral de Flores Santana.
En horas de la mañana durante la eucaristía oficiada por monseñor Agripino Núñez Collado, el ex presidente Hipólito Mejía calificó a monseñor Flores Santana como un hombre excepcional.
Mejía quien desde 1953 hasta el 55 trabajó como monaguillo del entonces sacerdote en la iglesia san Bartolomé de Gurabo, consideró que más que beatificarlo, debería ser declarado el primer santo dominicano.
Y es que a juicio del ex mandatario, la hoja de vida fue extraordinaria, pues siempre estuvo apegado a los principios cristianos.
De su lado, la Primera Dama, Cándida Montilla de Medina, quien se definió como una discípula de monseñor Flores Santana, dijo que se debía dar gracias a Dios por su permanencia. Montilla de Medina recordó que trabajó junto al sacerdote en la escuela de evangelización Emiliano Tardif.
Al destacar el ejemplo que deja, llamó a no llorar la partida, sino a vivir en su ejemplo. También asistieron el dirigente político Julián Serulle y la gobernadora provincial, Aura Toribio.
Durante la homilía, monseñor Agripino Núñez Collado destacó la labor pastoral desempeñada por Flores Santana de 87 años de edad quien falleció el pasado domingo.
