El tenis descansa, pero el tiempo sigue corriendo. Y Serena Williams continúa sumando millas de viaje como número uno del mundo.
El lunes pasado la estadounidense alcanzó 150 semanas consecutivas en lo más alto del ranking y quedó a solo seis de la segunda mejor marca histórica, que ostenta Martina Navratilova.
Serena está en la cima de la clasificación desde febrero de 2013, fecha hasta la cual había distribuido otras 123 semanas de liderazgo a lo largo de 11 años (pisó el número uno por primera vez en julio de 2002). Pero desde aquella reconquista, Williams arrasó con seis títulos de Grand Slam e hilvanó una enorme supremacía en el circuito femenino, con racha de 171 triunfos y apenas 13 derrotas.
El 2016, entonces, la verá reiniciarse en las puertas ya de otra marca para la historia en la WTA, con el Abierto de Australia oficiando como punto clave en el movimiento. Serena también superará a Navratilova en este escalafón, así como lo hizo en el de títulos conquistados de Grand Slam (21 a 18).
