BEIRUT, Líbano (AP) — Al menos 13 niños murieron el miércoles cuando proyectiles de mortero cayeron en una escuela en un suburbio rebelde al este de Damasco, dijeron activistas, que agregaron que los cuerpos ensangrentados estaban en un hospital en espera del entierro.
Los niños sirios a menudo son víctimas de la guerra civil en el país, ahora en su cuarto año, pero raramente son blancos específicos de ataques. El ataque del miércoles en el pueblo de Qaboun es el incidente de violencia más grave contra menores en el país desde que un doble ataque suicida mató a 25 niños en un barrio bajo control del gobierno en la ciudad central de Homs en octubre.
Tres proyectiles de mortero cayeron en la Escuela Haya en Qaboun antes del mediodía, dijo un activista local de nombre Abu Akram al-Shami. Otro activista en Damasco, Amar al-Hassan, reportó también el incidente, al igual que Rami Abdurrahman, del Observatorio Sirio de derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña.
Abdurrahman dijo que 13 niños murieron en el ataque, pero que la cifra muy probablemente aumentaría. Un colectivo local de activistas, la Oficina de Prensa de Qaboun, dijo que la cifra era de 17 muertos. Cifras contradictorias son algo común inmediatamente después de ataques.
En un video amateur colocado en internet, los cadáveres de al menos nueve niños con ropas ensangrentadas yacen en un piso de losa blanca. En otro video, otra mujer se abre paso entre la muchedumbre en una instalación médica local, golpeándose el pecho y gritando: «¡Mi hijo, mi hijo!».
Los videos parecen genuinos se corresponden con reportes de la AP sobre el incidente.
No estaba claro de inmediato quién disparó los proyectiles. Tanto las fuerzas del presidente Bashar Assadf como la oposición usan morteros. Activistas dijeron que pensaban que las fuerzas pro Assad eran responsables — simplemente porque era improbable que los rebeldes disparasen contra su propia gente. Funcionarios del gobierno no comentaron sobre el ataque.
Los rebeldes y las fuerzas del gobierno alcanzaron una tregua en Qaboun hace unos cinco meses, y hasta el miércoles el pueblo no había sufrido serios incidentes de violencia desde entonces. El pueblo alberga a miles de sirios desplazados de otras áreas rebeldes.
También el miércoles, en las regiones curdas en el norte y el nordeste de Siria, fuerzas curdas distribuyeron volantes en los que ordenaron a residentes reportarse para servicio militar obligatorio, dijo el Observatorio. Los curdos sirios gobiernan su área, mayormente autónoma, llamada Rojava.
Los curdos han estado en la línea del frente de los combates contra el grupo extremista Estado Islámico.
