Tal cual la serie de tv de los años 70, el filme es el cotidiano de una familia disfuncional. Como miniserie las subtramas funcionan a las mil maravillas, pero en un largometraje es una trampa, y su manejo es reservado a formidables guionistas. Dicho y hecho Sombras Tenebrosas cae en su propio fraude al querer ser comedia, pero el resultado es la cosa más sin gracia que se pueda imaginar; dicho eso, si partimos de quienes son sus responsables, que sumados todos hacen unos ocho Óscar. Y tener un Óscar no es garantía de que un filme va a salir bien, simplemente porque el arte no es un resultado planeado, sale porque sale y porque alguien con talento se lo propuso, suena raro pero es así.
Los primeros minutos, en la presentación de historia y personajes, es una delicia. Lo que sigue es lúgubre. Los chistes le saben a uno a tomadura de pelo. De manera que no va a encontrar ninguna lectura emocional.
El encanto mayor es visual. Una producción perfecta. Por supuesto, es lo acostumbrado en Burton: fuerte expresionismo, con una paleta de colores (análoga a sus filmes anteriores), muy bien pensada.
La dirección de arte nos mete de cabeza en los años 70. Pero, tal parece que el director puso en piloto automático las actuaciones, por ese resultado donde ni las estrellas como Deep se hacen sentir. Y es que el guión solo acierta a ser una rutina estética sin contenido.
El guión nunca termina por construir un arco seductor, la historia es desabrida, y, por supuesto, se agarran del “Dios ex machina” con personajes que entran y desaparecen porque eso es bueno para darle ritmo (¿tomadura de pelo?).
HH Título original: : Dark Shadows Dirección: Tim Burton Guión: : John August y Seth Grahame-Smith . Elenco protagónico: Johnny Depp, Eva Green y Michelle Pfeiffer Género: Comedia. Año: 2012. País: Estados Unidos Duración: 113 minutos
