Guayabal, Azua. Hace seis meses que los munícipes de esta comunidad apartada al sur del país se sentaron a hablar de futuro. Sobre qué pasaría si continúan usando la tierra de forma indiscriminada, acentuando cada vez más la deforestación.Hablaron, además, sobre cómo hacer frente a las inundaciones que incomunican el poblado cuando ocurren fenómenos atmosféricos y sobre temas vitales como la creación de empleos y la mejora de la calidad de vida de sus moradores.
De esas discusiones entre los distintos actores comunitarios surgió el Plan de Ordenamiento Territorial, una iniciativa impulsada por la Fundación Sur Futuro, que preside Melba Segura de Grullón, en colaboración con la Dirección General de Ordenamiento Territorial, que busca fortalecer los gobiernos municipales y fomentar el desarrollo sostenible.
En el estudio quedaron plasmadas las aspiraciones y metas de los actores clave de esta comunidad que pretenden que, dentro de quince años, Guayabal se convierta en un territorio próspero, socialmente equitativo, con servicios de calidad e instituciones sólidas. Entre las problemáticas detectadas en el informe se encuentra el avanzado deterioro de las vías de acceso a la población y un bajo aprovechamiento de la capacidad productiva del territorio.También se plantea el reasentamiento del poblado en una zona más apartada del río Las Cuevas para evitar las inundaciones.
Al entregar el documento a las autoridades locales, Kathia Mejía, directora ejecutiva de Sur Futuro, afirmó que Guayabal ha sido pionero en materializar un proyecto de esta naturaleza, gracias a un esfuerzo concentrado y consensuado para construir un municipio próspero.
Añadió que tras conocer las necesidades de la población sólo queda pendiente gestionar los recursos económicos y humanos para resolver los principales males que afectan a la comunidad.
La ejecutiva confía en que este trabajo constituya un modelo de orientación que se replique en otros municipios y regiones del país.
El alcalde de la demarcación, Alcibíades Vicente, agradeció a la fundación Sur Futuro por propiciar la iniciativa, y señaló que el principal reto será implementar el plan que deberá ser una tarea de la comunidad junto a las autoridades gubernamentales. Carlos Briceño, de la consultora Geomatrix, dijo que el plan será ejecutado en tres etapas y tendrá un costo aproximado de RD$900 millones.
