Jamao al Norte. Los daños ecológicos con el desmonte de cientos de árboles, ocasionados por propietarios de fincas, comienzan a afectar el cauce del río La Gloria, enclavado en la Cordillera Septentrional.La zona de Los Bueyes, de Villa Trina, es la más afectada, con la quema de varias especies y la tala indiscriminada, pese a las denuncias hechas ante el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, por sectores preocupados por la foresta.
Otras de las preocupaciones de instituciones como la Asociación para el Desarrollo de Espaillat y los Ecotours de Jamao al Norte, es la operación del basurero municipal a escasos metros de la ribera del río. Aunque estas instituciones intentan vender estos espacios como destinos ecoturísticos, la humareda que se desprende del vertedero ocasiona afecciones respiratorias.
“Estas comunidades sobreviven de las personas que nos visitan y que quieren disfrutar de las cristalinas aguas del río La Gloria, pero estos problemas de desmonte y contaminación no ayudan para nada”, expresa Gregorio Santos, residente en la zona.
En todo el trayecto desde Jamao hasta Villa Trina en su paso por Los Bueyes, han comenzado a construir proyectos que permiten una estadía placentera.
No obstante, las condiciones del medio ambiente y el mismo deterioro de la carretera, se convierten en los mayores obstáculos para poder desarrollar la zona. El puente que comunica a Villa Trina con Jamao al Norte colapsó a pocos días de ser inaugurado por el gobierno.
Recientemente, organizaciones como Los Peregrinos de Moca, convocaron a un paro por 48 horas para demandar la construcción de una nueva pasarela y para reclamar la intervención de Medio Ambiente.
Juan Comprés, dirigente comunitario critica la desidia de las autoridades gubernamentales para dar respuesta a los problemas más acuciantes de estas comunidades.
