Se trata de una modalidad que se caracteriza por no tener complicaciones, efectos secundarios y lo más importante, es sin anestesia. Se trata de la nueva cirugía digital.
Esta nueva especie de photoshop trata de transformar a las estrellas detrás de la pantalla. Si al personaje le hace falta cabello, es muy bajito o necesita arrugas, no hay nada que un retoque digital en la película no pueda hacer.
Aunque esta práctica ya es conocida para retocar las fotografías en revistas, el proceso también se está popularizando con las imágenes en movimiento.
Tal ha sido el caso de artistas como Britney Spears, quien ha sido acusada de haber manipulado su imagen en el video musical «Work» para parecer más alta y delgada; o actrices como Margot Robbie y sus piernas largas en la famosa película «The wolf of wall street», cuando solo mide 1,67 de altura.
En Australia, el estudio de efectos especiales Lola Visual Effects ha reconocido ser partícipe de esta práctica de magia digital.
