Aunque no garantizan evitar la sustracción de vehículos, existe una multiplicidad de dispositivos tecnológicos para alertar a los propietarios de automóviles. Esta variedad tecnológica tiene en un primer orden el famoso Sistema de Posicionamiento Global, mejor conocido como GPS.
Y luego le siguen inventos como celulares interconectados con dispositivos instalados en los automóviles, llavines digitales, apagadores automáticos de autos, localizadores o un mecanismo que permite desactivarle la corriente al vehículo en caso de que algún malhechor intente prenderlo para robárselo.
Uno de los sistemas más utilizados por los dueños de vehículos que deciden poner candado antes de que les roben, son los sistemas de rastreo satelital de cualquier compañía especializada en la fabricación o venta de estos productos. Estos equipos de GPS permiten la localización de los vehículos en un tiempo comparativamente rápido o por lo menos ofrece posibilidades de que en algún momento pueda ser ubicado y devuelto a sus propietarios.
Otro sistema que en los últimos años ha adquirido mayor demanda es uno que se adapta a los teléfonos celulares. Este dispositivo avisa al dueño del vehículo cuando algún maleante se acerca para intentar abrirlo y llevarse algún objeto de valor o para encenderlo y llevárselo.
Este sistema envía inmediatamente la señal de alerta y el propietario puede apagar el vehículo desde donde se encuentre e impedir que se lo sustraigan.
Otro método preventivo consiste en colocarle un sistema al vehículo que impida neutralizarle la corriente para evitar que los ladrones puedan encenderlo con relativa facilidad.
Sin embargo, el comandante del Departamento de Recuperación de Vehículos de la Policía, coronel Guillermo Báez Ubiera, explica que este dispositivo de seguridad no es ya muy recomendable, debido a que, al igual que la tecnología, los ladrones de vehículos también han ido perfeccionando sus técnicas.
Así las cosas, la instalación de GPS sigue siendo aun la más efectiva de las herramientas tecnológicas para rastrear y ubicar vehículos robados.
Este mecanismo consiste en colocarle un transmisor con un chip integrado que envía una señal que alerta sobre su ubicación, independientemente de que al vehículo le quiten la batería.
Este dispositivo se coloca en un lugar oculto del vehículo, de tal forma que no pueda ser fácilmente detectado por los ladrones.
“Inmediatamente ese vehículo es sustraído por un ladrón el propietario llama de una vez a la compañía (que lo instaló) y de una vez activan ese sistema”, explica Báez Ubiera.
La compañía que instala ese sistema de rastreo se pone rápidamente en contacto con el Departamento de Recuperación de Vehículos, para coordinar la ubicación del vehículo robado.
Entonces se activa la persecución policial con agentes especializados en esta área, que generalmente proceden de la zona o región donde ha sido dada la señal de localización.
Otros sistemas
Para evitar el robo de vehículos existen también sistemas de alarmas convencionales, sensores de movimiento y el bloqueo electrónico de la transmisión.
Desde hace varios años, en el mercado dominicano se oferta igualmente un sistema que informa si el vehículo fue violentado y activa una llamada de forma automática al dueño o directamente a la Policía.
Hay expertos en fabricación o montajes de alarmas que sugieren sistemas de seguridad para vehículos sencillos, porque a su juicio suelen ser más efectivos y económicos.
Sin embargo, esta teoría no tiene tanto significado entre quienes prefieren comprar dispositivos más modernos, aunque les resulte mucho más costoso.
La larga lista de dispositivos de seguridad incluye una combinación de cinturón y botones.
Consejos policiales para no caer en viejas trampas
Aunque los dispositivos descritos son una ayuda eficaz en la prevención y persecución del robo de vehículos, el Departamento de Recuperación de Vehículos Robados distribuye un material de orientación en forma de brochure, en el que recomienda seguir varios pasos para evitar el robo de autos. Entre estas recomendaciones destacan, no dejar el vehículo en lugares solitario por mucho tiempo; no dejar objetos de valor visibles dentro del vehículo, como armas de fuego, maletines, computadoras o bultos; en caso de ser impactado por la parte trasera, tener cuidado al detenerse en lugares solitarios; y cuando asista a lugares públicos no entregar las llaves del vehículo a los parqueadores informales.
