A todo galope en la NBA

La columna reservada para los mejores récords de la NBA tiene visitantes inesperados. Ese efecto sorpresa es que lo convierte en protagonistas de las mejores historias que se viven en la temporada a poco más de un mes de haber comenzado.

La columna reservada para los mejores récords de la NBA tiene visitantes inesperados. Ese efecto sorpresa es que lo convierte en protagonistas de las mejores historias que se viven en la temporada a poco más de un mes de haber comenzado.¿Indiana Pacers (16-2) por encima de Miami Heat (14-3) en la Conferencia Este? Una cosa es competir con los campeones, tal y como sucedió en las finales de conferencia de la pasada temporada, y la otra es lucir superior a los favoritos para repetir la corona en algún momento de la contienda.

La escuadra dirigida por Frank Vogel se presenta con una férrea defensa que permite 87.6 puntos por encuentro a la oposición, la mejor de la NBA. La principal tarjeta de presentación de los Pacers es su defensa. La calidad atlética de sus mejores hombres se siente en la duela en cada partido. De hecho, han permitido 100 o más en tres oportunidades en lo que va de estación y en dos ocasiones han sucumbido. Ante los Bulls de Chicago el 16 de noviembre, cuando perdieron 110-94, y el pasado lunes en su derrota ante Portland 106-102.

 Miami le sigue los pasos a Indiana. Comenzaron un poco lentos, pero después que LeBron James, su líder y sin duda alguna el mejor jugador del planeta, emitió una voz de alerta para que se elevara el nivel de producción tras una derrota ante Boston 111-110 el nueve de noviembre, el equipo ha ganado 10 partidos en línea. Anoche se medían a los Pistones de Detroit.

¿Portland? ¿Los Trail Blazers compitiendo con los siempre terribles Spurs de San Antonio (ambos con 15-3) por el mejor récord de la Conferencia del Oeste? Hay una diferencia muy marcada entre tener talento y ponerlo al unísono para producir a un nivel tan exigente.

Huelgan los ejemplos de escuadras repletas de jugadores con más herramientas que un centro de mecánica industrial que han fracasado en cumplir con las expectativas trazadas.

Ese crédito hay que dárselo al dirigente de los Trail Blazers, Terry Stotts,  quien fue seleccionado el Dirigente del Mes en la Conferencia del Oeste, honor que recibió Vogel en el Este.

Ambos se enfrentaron el lunes en el Rose Garden de Portland, donde los dueños de casa sacaron la mejor parte. Fue un partidazo y a la vez un indicativo de lo que pueden hacer esta temporada.

LaMarcus Aldridge dirige el ataque en el Rose Garden

El nativo de Texas es la figura de los Trail Blazers, que ahora deben recibir el mote de dominantes.

Promedia 22.7 puntos por juego y 9.6 rebotes por encuentro, los mejores números de su carrera que comenzó en la campaña de 2006-07.
Aldridge, un delantero de poder que mide 6´-11´´, tiene el apoyo de Damian Lillard, un armador de nueva generación que mejora con cada partido. Lillard anota 20.6 puntos por choque y reparte 5.7 asistencias. El nativo de Oakland, California, con 6´-3´´ de estatura tiene reputación de encestar los canastos a la hora buena.

Nicolas Batum, Wesley Mathews y el centro Robin Lopez, entre otros, acompañan a Aldridge en la escuadra de Portland que construye un nombre de poder en el difícil Oeste de la NBA.

Wall se deja sentir con los Wizards

Al inicio de la jornada de anoche, Washington (9-9) es uno de tres equipos que juegan para .500 o más en el Este de la NBA.  Los Wizards se unen a los Pacers y Heat con esa distinción, en una Conferencia que ha dejado mucho que desear debido a los desplomes de los Brooklyn Nets y New York Knicks, para citar dos ejemplos.

El armador John Wall, 6´-4´´ de estatura, comanda la tropa de la capital norteamericana. Promedia 19 puntos y 9.2 asistencias por encuentro. Es segundo en asistencias en la liga detrás de Chris Paul (12.1), de Los Clippers.
El brasileño Nene Hilario y Trevor Ariza, entre otros, se unen a Wall en un equipo que ha comenzado bien.

Carter-Williams, el novato sensación con Filadelfia 76ers

Primero que todo, Michael Carter-Williams encabeza la liga en robos por partido con un promedio de 3.1.

Para ser un novato destacado en la NBA se requiere de mucha capacidad. La intensidad de cada jornada desgasta a cualquier mortal, así que lo de Carter-Williams, un armador de 6´-6″ de estatura que juega con Filadelfia, es loable. Hasta el momento, es el mejor novato de la cosecha. Anota 17.1 puntos por juego y reparte 7.1 asistencias.

Tiene competencia en Victor Oladipo, de Orlando Magic, quien es otro talentoso principiante. Los elogios han sido muchos para el joven de 22 años de edad. Bueno en las penetraciones, se mete a rebotar y cuenta con visión para poner a sus compañeros a producir. Necesita trabajar en su tiro, a lo que deberá dedicar muchas horas el resto de su carrera, pero la impresión que ha causado es gratificante en un equipo de Filadelfia que espera mucho de él.

George se gana el respeto en la liga

Todo inició en la pasada temporada durante las Finales de Conferencia del Este, cuando LeBron James le dio un saludo tras un intercambio de canastos fenomenales que se podía traducir como una señal de respeto por lo que en ese momento desplegaba en cancha. Paul George no lo ha hecho quedar mal. Para nada. George se ha convertido en el líder de los Pacers, que esta campaña tienen el mejor  récord de la liga.

El pequeño delantero de 6´-9″ de estatura, nativo de California, está cuarto en anotación con un promedio de 24.9 por encuentro. Por delante de George en puntos están Kevin Durant, Carmelo Anthony y James.

Los Pacers también cuentan con Roy Hibbert, David West, George Hill, Lance Stephenson, además de una buena banca. Tienen varios compromisos de peso esta semana, como San Antonio y Oaklahoma por ejemplo, obstáculos a los que deben imponerse si piensan destronar a Miami.

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