El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) aprobó un fondo para el país de US$12 millones para desarrollar programas dirigidos a menores de 18 años. El programa de cooperación, que comienza este año y concluye en el 2016, está orientado en cuatro ejes fundamentales contemplados en los Objetivos del Milenio, y consiste en mejorar la cobertura y calidad de los servicios de salud, educación, protección infantil, así como los centros de documentación y estadística que trabajan con estos temas.
La información la ofreció María Jesús Conde, representante de Unicef en República Dominicana, quien explicó que reducir la mortalidad materno-infantil, la transmisión vertical de VIH y prevenir los embarazos en adolescentes, será la prioridad para los próximos cinco años.
Indicó que en el ámbito de la enseñanza trabajarán para mejorar la calidad de la educación primaria y la cobertura de la secundaria, con especial énfasis en la política de inclusión. “Vamos a ver cuáles son las causas por las que los niños abandonan las escuelas. Puede ser el embarazo en adolescente, el trabajo infantil, la falta de acta de nacimiento o la violencia. Vamos a establecer políticas concretas que permitan la vuelta de los niños a la escuela, así como el fomento de la participación de las asociaciones de padres y amigos a las escuelas”, refirió Conde.
Explicó que también se hará énfasis en la protección de los niños que sufren violencia, el abuso, la trata y el tráfico.
Dijo que, en ese sentido, seguirán fortaleciendo las capacidades de la Policía Nacional, el Cuerpo Especializado de Seguridad Fronteriza, el Poder Judicial, las fiscalías y el Consejo Nacional para la Niñez, para que en primer lugar, se prevenga este tipo de acto, y cuando ocurran, las leyes no favorezcan la impunidad. Propone que sean creados centros de protección para las víctimas de abuso infantil.
La mortalidad materno- infantil sigue siendo alta
En una entrevista para elCaribe, Conde resaltó que los resultados de los programas de los últimos cinco años han sido positivos, ya que se redujo la mortalidad materno-infantil, aunque afirma que sigue siendo un grave problema para este país. “Tenemos una tasa de mortalidad que no se corresponde con este país, porque todavía hay zonas de mucha exclusión”, afirmó.
