Esperar mientras se realiza un trámite pocas veces resulta agradable para la gente. Si esa espera se torna larga y encima de eso hay que realizar algún pago, entonces el asunto es peor.Para los organismos recaudadores, como la Dirección General de Impuestos Internos (DGII), lograr que la gente esté al día con sus obligaciones tributarias es fundamental, porque eso se traduce en dinero para el fisco. Como una forma de “ganar-ganar”, la DGII creó el pasado año el mecanismo virtual de obtención de “Certificaciones de Cumplimiento de Obligaciones Fiscales”, eso que la gente denomina “Certificación de Impuesto al Día”, y por los resultados que está logrando la institución, no se arrepiente de haberlo hecho.
De julio de 2014 a marzo de este año 2015, la institución había entregado 55,652 Certificaciones de Impuesto al Día, y de ellas 30,524 fueron por Oficina Virtual (la gente las solicitó desde un computador), es decir, el 54% del total. Las otras 25,128, los contribuyentes las obtuvieron yendo a las administraciones locales que tiene la DGII en todo el territorio nacional, o sea, a las oficinas, que es donde la espera puede tornarse larga.
La oficina virtual tiene también la particularidad y ventaja de que es un servicio con entrega inmediata y disponible las 24 horas del día, todos los días de la semana. Eso, no lo logra el contribuyente cuando hace la solicitud de manera presencial. De acuerdo a informaciones obtenidas en la DGII, la Certificación de Impuesto al Día ha sido el servicio de mayor demanda en sus oficinas; para obtenerla el solicitante tiene que pagar RD$300. Otra ventaja que tiene solicitar el documento es que si la Dirección de Impuestos se la niega es muy probable que eso represente una alarma a favor del usuario. Una alarma de que usted, posiblemente, tiene una obligación tributaria pendiente con el fisco o una inconsistencia (los números de usted cuando presentó el balance de sus ingresos no cuadran con la suma que hizo la DGII), de la cual, a lo mejor no se había percatado.
La tardanza pasada
El Gobierno ha logrado avances en materia de tecnificación y recursos humanos en su fiscalidad. Antes, conseguir el documento de Impuesto al Día implicaba hacer la solicitud y el pago, y regresar ocho o diez días después a recogerlo, cuando el encargado de la oficina donde se realizó el trámite lo firmara. Según datos de la DGII (extraídos de su Revista Moderna) ese organismo invertía el 26% del tiempo dedicado a los contribuyentes en la preparación y emisión de certificaciones.
No presentarlo le puede impedir obtener un pago
Para un contribuyente, especialmente una persona física, poder demostrar cada mes que no arrastra problemas con el fisco ,tiene un conjunto de ventajas. Una de ellas es que si ofrece servicios al Estado, no tendrá problemas para cobrar cada mes su pago. El Estado exige que junto a la factura para los cobros el beneficiario coloque esa constancia de que “la luz de la deuda o la falla” no ha sido encendida en contra por la autoridad recaudadora.
