Viva la libertad

El carismático actor italiano Toni Servillo brinda una portentosa actuación cumpliendo con elegancia la interpretación de dos hermanos gemelos con apenas su formidable y carismático arsenal de gestos y miradas. Muestra así la fortaleza narrativa&#823

El carismático actor italiano Toni Servillo brinda una portentosa actuación cumpliendo con elegancia la interpretación de dos hermanos gemelos con apenas su formidable y carismático arsenal de gestos y miradas. Muestra así la fortaleza narrativa de una historia contada con gracia y estilo muy italiano de la prisión psicológica en que se mete, casi sin darse cuenta, la gente que hace política, que entra en política y se hace reo de intereses malsanos en su mayoría. Con elocuencia defiende el filme la idea de cuestionar y combatir esos pactos políticos de aposento, esos que se hacen a espaldas de la conveniencia de una salud democrática de un pueblo. Con donaire y maestría el guión se aleja de la estructura clásica del “inicio-medio-fin”, volcándose en escenas hilarantes donde juega con asuntos muy serios en clave de humor. Los personajes y sus reacciones dan el tono y el ritmo donde el público queda atrapado ante las verdades dichas en circunstancias risibles por la trama escogida, de la que se vale de una forma bastante innovadora. De ese tipo de historias llevadas por hermanos gemelos ya el cine se ha ocupado con filmes con la conocida fórmula de “intercambio de papeles”. La diferencia aquí es que los personajes centrales, gemelos, viven vidas diferentes aunque tienen la misma visión del mundo; uno actúa profesionalmente como político en democracia como la conocemos y el otro recibe las consecuencias como par de los gobernados. ¿Será que es verdad como un templo aquel aforismo de que “Yo soy yo y mi circunstancia”? Aquí esa orientación es traducida mediante una farsa política, es decir una comedia de humor negro. Como discurso global, su discurso ideológico se orienta hacia cuestionar a aquella política como fin en sí misma, un debate en el que se habla mucho de que la política debe ser practicada como instrumento de cambio y desarrollo social para beneficio de todos. Retrata así el filme, con agudeza y refinamiento narrativo, la miseria política que vivimos que dan para varios estudios antropológicos y sociológicos. Esta es una de las ventajas de desmenuzar grandes temas que tiene el cine, y de hacerlo en escasos minutos y en ambiente bastante divertido como el caso. La tienen en Fine Arts Cinema de Novo Centro. l

HHHH Género: comedia negra.
Duración: 90 minutos

Posted in Sin categoría

Más de

Más leídas de

Las Más leídas