Santiago. El abandono de las labores de limpieza por parte de la alcaldía de Santiago ha provocado que algunas calles estén bloqueadas para transitar, debido a que se han convertido en vertederos. La crisis se agudiza con las protestas de los buzos, que impiden desde el pasado lunes, que camiones de las empresas recolectoras depositen los desperdicios en el Ecoparque de Rafey. En avenidas como la 27 de Febrero y la Armando Bermúdez, el desborde de basura hace que las vías se vean prácticamente como pocilgas, llenas de todo tipo de desperdicios, lo que causa malestar en la población santiaguense.
En la mayoría de las vías del residencial Jardines del Rey, y la nueva avenida Hatuey, que conecta con la Circunvalación Norte, la basura impide que las personas puedan desplazarse a pies o en vehículos.
Un servicio precario
“Apenas podemos caminar por una esquina de las aceras. Aquí los camiones dejaron de pasar después que pasaron las elecciones y tememos que puedan producirse brotes de enfermedades”, expresó Flor Inoa, residente en esa zona, al hablar con elCaribe. En los barrios de la zona norte y noroeste de Santiago como el Ensanche Libertad y Cienfuegos, las calles permanecen repletas de sacos y fundas con basura. Los moradores de estos barrios dicen que se ven obligados a lanzar los desperdicios, pues los camiones recolectores dejaron de pasar por sus calles y no pueden mantenerlas dentro de sus casas.
Para afianzar más el problema, prácticamente los camiones de la alcaldía dejaron de ofrecer servicio y solo algunos de las empresas Conwaste y Urbaluz siguen recogiendo, al igual que los camioncitos de Obras Públicas, pero resultan insuficientes debido al cúmulo de basura. Esta situación se repite en otras ciudades donde los alcaldes actuales no fueron reelectos.
Los esfuerzos han sido insuficientes
Tan pronto concluyeron los comicios, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales tuvieron que declarar a esta ciudad en estado de emergencia y junto a Obras Públicas y un equipo del alcalde electo, Abel Martínez, decidieron intervenirla. Sin embargo, apenas cuentan con algunos camioncitos que han resultado insuficientes para hacer frente a la realidad.
