Tres importantes ríos trazaron los límites de la ciudad de Santo Domingo, separando territorios con su curso. La necesidad de comunicar la ciudad con otras localidades del Distrito Nacional y el interior obligó a los gobiernos de la postrimería del siglo XIX y los del siglo XX a apuntar a la construcción de estructuras viales sobre los ríos Ozama, Isabela y Haina.
A fin de comunicar vía terrestre la capital de la República Dominicana, a lo largo del tiempo se construyeron nueve puentes, algunos de los cuales sobrepasan los sesenta años, por lo que desde su construcción han sido intervenidos en diferentes periodos gubernamentales.
Los puentes permiten salvar un accidente geográfico para facilitar la comunicación entre dos puntos, como los ríos Ozama, Isabela y Haina, en el caso de los de Santo Domingo.
En término de viabilidad del tránsito, los puentes sobre esos ríos han sido de una utilidad cardinal.
Flujo del tránsito
Un levantamiento realizado en el 2011 con proyección al 2016 por Tecnoamérica, empresa que ha diseñado y supervisado la mayoría de los elevados construidos en la ciudad, arrojó que sobre los puentes flotantes, Ramón Matías Mella (Bicicleta), Juan Pablo Duarte, Juan Bosch, Francisco del Rosario Sánchez (de La 17), Francisco J. Peynado, Jacobo Majluta y el presidente Troncoso transitan medio millón de vehículos por día, para un cálculo de 42 mil vehículos por horas.
El presidente de Tecnoamerica, Pedro Delgado Malagón, quien se desempeñó como secretario de Obra Públicas en el periodo 82-86, dijo a elCaribe que “ya esta ciudad genera unos volúmenes de tráfico que son impresionantes”, expresa Delgado Malagón, y propone la creación de dos nuevos puentes: uno que conecte al Distrito Nacional con Santo Domingo Este (como prolongación de la avenida George Washington hasta la avenida España); otro que enlace la ciudad con el municipio Santo Domingo Norte. (O en su defecto, ampliar el puente Francisco J. Peynado).
Según el estudio, en el 2011 por los puentes que comunican al Distrito Nacional con Santo Domingo Este, (Bosch, Duarte, Mella, flotante y el de La 17) circulaban 260 mil vehículos diarios. En la actualidad, transitan 320 mil por día. Esto significa que en una hora pico se movilizan alrededor de 28 mil vehículos.
“Veintiocho mil vehículos por hora es una cifra importantísima, sobre todo cuando los puentes en horas de la mañana y tarde se congestionan. Yo creo que ya casi es necesario hacer otro puente de gran capacidad, de cuatro carriles”, destaca.
Construir otro
Señala que la propuesta no es novedosa. “Siempre se ha pensado hacer ese puente aquí, como prolongación de la avenida George Washington y atravesar hasta la avenida España”, subraya.
Precisa que el puente deberá construirse con una altura que permita el tránsito de los barcos que navegan por el Ozama. Explica que en su defecto, se deberá estudiar la posibilidad de construir un túnel por debajo del río.
También considera que el desarrollo acelerado que ha experimentado Santo Domingo Norte requiere de la ampliación del Puente Francisco J. Peynado o la construcción de una nueva estructura para el tránsito de 100 mil vehículos diarios. Por hora se calcula que pasan ocho mil vehículos. Hace cinco años, por el puente J. Peynado transitaban 80 mil vehículos diario.
“Este es un puente de capacidad limitada. También debe estar saturado. Y creo que habría que pensar en ampliarlo o hacer otro”, sugiere Delgado Malagón.
Igual de importante es el puente Jacobo Majluta, que atraviesa el río Isabela, en Santo Domingo Norte, por el que transitan diariamente 35 mil vehículos.
Resalta que este puente tiene un ingrediente adicional: más del 20% de su tráfico es muy pesado. Explica que la estructura juega el papel de una circunvalación interior.
Para comunicar a Santo Domingo con el municipio de San Cristóbal se construyeron dos puentes sobre el río Haina: uno en la avenida 6 de Noviembre y el otro en la carretera Sánchez, el cual recibe el nombre Presidente Troncoso. En este último transitan 40 mil vehículos diario.
El puente Ozama, construido en la avenida Charle de Gaulle, al igual que el puente de Sabana Perdida, que conecta el norte de Santo Domingo con el Este, juegan un rol importante en el tráfico creciente del Gran Santo Domingo.
Balaguer no quería puente “pegado a ciudad”
Delgado Malagón recuerda que cuando era secretario de Obras Públicas en su despacho había una maqueta de un puente sobre el río Ozama.
“Era un puente muy alto, muy hermoso que empezaba por el obelisco hembra y bajaba a la avenida España.
Dice que cuando salió del Gobierno en el 86, algunas empresas interesadas en el proyecto llevaron al presidente Balaguer varias propuestas. “Ya el doctor Balaguer estaba ciego, pero tenía una idea muy clara de lo que era la Ciudad Colonial”, afirma. Cuenta que en ese entonces, el presidente Joaquín Balaguer no aceptó las propuestas aludiendo a que la imponencia de un puente en este lugar disminuiría el valor estético del Centro Histórico. “Va a hacer una ciudad pegada a un puente”, dijo el doctor Balaguer, refirió.
Pero el tráfico que fluye del Distrito Nacional a Santo Domingo Este obliga a considerar la construcción de una nueva estructura, opina Delgado Malagón. Destaca que los puentes Juan Bosch y Duarte, que conectan a la avenida Las Américas, reciben el mayor volumen de tránsito. La causa está en el tráfico turístico que va al Este, Punta Cana, al Aeropuerto Internacional de Las Américas y otros puntos.
De los puentes construidos sobre el río Ozama para comunicar el Distrito Nacional con Santo Domingo Este, el Juan Bosch es el más joven. La estructura vial fue inaugurada en el 2001.
Historia
El 3 de septiembre de 1930 un ciclón abatió la ciudad de Santo Domingo, destruyendo a su paso el puente Ulises Heureaux, construido sobre el río Ozama.
Estructuras
Los puentes Ramón Matías Mella y el Francisco del Rosario Sánchez se construyeron en la década de los 70 en el gobierno del presidente Joaquín Balaguer.
