Correo de los lectores

¡Buen viaje por la vida!Señor director. Mayormente andamos por la vida en busca de la felicidad. Para muchos una utopía, para otros el tesoro mejor guardado y para la gran mayoría algo pasajero, viene y va, lo asocian…

¡Buen viaje por la vida!

Señor director. Mayormente andamos por la vida en busca de la felicidad. Para muchos una utopía, para otros el tesoro mejor guardado y para la gran mayoría algo pasajero, viene y va, lo asocian a los buenos y agradables momentos de la vida. En sentido general, felicidad es andar alegre y despierto por la vida, viviendo de lleno cada momento sin hacer dramas rememorando un pasado ya pasado y sin hacer crisis angustiosas por un futuro que no llega aún. Felicidad es simplemente estar presente en su vida, sentirla, palparla, saborearla, vivirla y disfrutarla tal cual llega, tanto en los buenos como en los malos ratos. En los buenos disfrutamos con risas y algarabías y en los malos con llanto y lamentaciones, pero disfrute al fin y al cabo, pues ¿Quién no disfruta llorar cuando esta triste y lamentarse cuando se ha equivocado o fracasado?, ese es el verdadero disfrute y la verdadera felicidad, no reprimir las emociones y dejarlas salir.

La felicidad no está en ningún lugar, es un regalo que llevamos con nosotros siempre, solo que pocas veces lo abrimos, agradecemos y apreciamos. Así de rápido como nos lleva la muerte, también se nos va la vida en vacíos existenciales, en nada concreto. Somos fantasmas jugando a estar vivos, pero incluso los fantasmas poseen emociones y hacen lo posible por transmitírnoslas. Honremos el privilegio de tener una vida a nuestra disposición para hacer lo que deseamos fervientemente sin justificarnos, sin demoras ni vacilaciones, simplemente ¡Vivamos!

Nos pasamos la vida buscando un norte, un eje que nos sirva de soporte o de referencia para girar y girar al igual que los planetas giran en el mismo centro y lugar sin aparentemente avanzar, pero en realidad no necesitamos un norte ni un eje, nosotros mismos somos el norte o el eje, de nosotros parte todo lo que hemos creado y existe y a nosotros regresa crecido y multiplicado.

La vida es un viaje en el que muchas veces nos sentimos solos y a oscuras, trata de aprovechar ambas sensaciones, deja que la oscuridad te inunde y te deje usar otro tipo de visión más clara, que te permita ver lo que te impide ver la luz que tanto anhelas, y reconoce que la soledad es una condición mental, no física, pues nunca estamos realmente solos. Disfruta ese viaje como de niño disfrutabas de tus juegos y golosinas y en tu adolescencia de tus vacaciones de verano, de tu vigor y candidez en tu temprana juventud; de tus hijos y tu familia si la has creado, de tus momentos de satisfacción y plenitud en la madurez; de tu sabiduría, tus capacidades y tus limitaciones en la vejez y de tus recuerdos y emociones nuevas en la ancianidad, cuando vuelves a ser niño otra vez.

Cada etapa tiene matices diferentes con motivos sobrados para sentirte feliz y agradecido. Sientan plenamente su vida sin mendigar o postergar la dicha de disfrutar cada momento y tengan un buen viaje por la vida.
Idalia Harolina Payano Tolentino
Ciudadana

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