Radhamés Liz y Héctor Gómez se lucieron en el triunfo de las Estrellas; Jorge Mateo condujo a los Toros a su quinto triunfo en línea y los Gigantes, liderados por Eloy Jiménez, aplastaron a los Tigres.

El abridor Liz lanzó una joya monticular y Héctor Gómez disparó un cuadrangular en la sexta entrada para que las Estrellas Orientales blanquearan anoche 1-0 a los Leones del Escogido.

La victoria le permite a las Estrellas (12-6) mantenerse en la cima de esta justa invernal. El equipo verde también exhibe un excelente récord fuera de la casa con 7-3, el mejor entre los equipos. El conjunto oriental mejoró su marca 3-0 en partidos decididos por una carrera. Además, con el triunfo, logran igualar la serie particular ante los rojos, 2-2. Fue la quinta derrota en línea para los Leones (8-10), que han perdido ocho de los últimos nueve encuentros.

En un partido escenificado en el estadio Quisqueya, y ante un gran duelo de picheo entre ambos abridores, los Orientales se afianzaron en el bate de Gómez, que logró su primer jonrón con la camiseta verde en esta campaña y un relevo excepcional que limitó la batería de los rojos en las tres entradas restantes sin permitir imparables.

Una vez más, el derecho Liz (1-0) lució como en años anteriores, muy efectivo tras lanzar seis entradas en blanco, permitió cuatro indiscutibles y abanicó a seis. El cerrador Wirfin Obispo se acreditó su séptimo salvamento de la temporada, líder en este renglón.

El partido se mantenía sin anotaciones hasta que en la parte alta de la sexta, al primer lanzamiento del relevista Daniel Corcino (0-1), Gómez pegó un estacazo de cuatro esquinas por el prado izquierdo, que fue la única carrera del partido que decidió la victoria verde.

El equipo rojo amenazó en el quinto episodio cuando después de un out, y con Liz en el montículo, Alex Valdez conectó un triple que se internó en el jardín izquierdo. Pedro López negoció transferencia. Pero al final, Liz controló la entrada tras provocar que Eliezer Alvarez bateara una rolata doble matanza.

Bambinazos de los Toros

En La Romana, Jorge Mateo y Raudy Read explotaron con el madero al conectar dos jonrones en el octavo y los Toros del Este vinieron de atrás para derrotar 6-3 a las Águilas Cibaeñas.

Fue el quinto triunfo consecutivo de los Toros (8-10), que por primera vez ascienden al cuarto lugar clasificatorio e igualan con los Leones y se colocan a un juego por debajo de las Águilas (9-9) y a cuatro del primer lugar. En los últimos diez partidos han ganado ocho.

Mateo alcanzó su primer partido de dos cuadrangulares en esta justa invernal y con dos estafadas llegó a 10, líder en este departamento.

Al ritmo de dos jonrones, la rebelión taurina fabricó cuatro vueltas en el octavo episodio ante los envíos de Richard Rodríguez que viró el marcador, 6-3.

La artillería de los romanenses contó con una sólida producción de Mateo, quien remolcó tres vueltas producto de dos cuadrangulares y anotó una segunda importante carrera tras negociar transferencia, se estafó la segunda y tercera y provocó un mal tiro en el plato, en el sexto. El conjunto naranja sigue produciendo y en cinco partidos han fabricado 37 carreras. Además, el relevo se mantuvo a la altura al maniatar los bates amarillos en cinco entradas y un tercio, apenas cedieron un solo imparable.

Con el partido, 3-2, a favor de los amarillos, y con Alexi Casilla en la inicial, Mateo pegó en conteo de 1-0, un bambinazo por el prado izquierdo que sacudió el estadio Francisco Micheli. Después de dos outs, y con Cristhian Adames en la primera base, gracias a un sencillo, el escenario quedó servido para el debutante Raudy Read, quien en conteo de 3-2 conectó un cuadrangular por el bosque izquierdo.

Gigantes se imponen

En San Francisco de Macorís, Eloy Jiménez y Richard Ureña se encargaron de liderar la tórrida ofensiva para que los Gigantes del Cibao apabullaran 9-1 a los Tigres del Licey.

Con el triunfo, los Gigantes (11-7) aún se encuentran en el segundo peldaño de la tabla de esta justa invernal. En tanto, que los Tigres (6-12) sufren su segundo revés seguido . El partido fue detenido durante una hora y cuarenta y cinco minutos a causa de la incesante lluvia caída en la región Norte.

La tropa francomacorisana que desplegó diez imparables anoche y contó con un efectivo picheo, logró su segunda victoria seguida y su octavo triunfo como dueños de la casa con apenas dos derrotas.

Los dueños de casa fabricaron siete vueltas en el cuarto episodio ante un Licey que volvió a cometer dos errores.

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