Unos 150 atletas de diferentes edades labran su terreno en este pesado deporte en la “Sultana del Este”

SAN PEDRO DE MACORÍS.- Cuando el reloj marca la una de la tarde, la puerta principal del pabellón de pesas, ubicado en el complejo deportivo de San Pedro de Macorís, es abierta para darle paso a unos 60 atletas de diferentes edades, quienes al igual que como lo hicieron Wanda Rijo, Guillermina Candelario, Yuderqui Contreras o Héctor Domínguez, tienen como finalidad destacarse en un futuro no muy lejano en esta pesada disciplina.

Esta nueva generación que se abre paso es guiada por Julio Rivera Gómez (René), quien junto a un equipo de entrenadores marca las pautas para seguir dándole la prominencia a San Pedro de Macorís como la “cuna de grandes pesistas”.

“En San Pedro hay un talento envidiable”, señala Rivera Gómez a elCaribe. “Actualmente tenemos más de 150 niños que a diario vienen a practicar este deporte en dos tandas. El relevo que hoy en día tenemos es bueno y poco a poco van marcando sus pasos porque quieren seguirles los pasos a otros miembros de sus familias que también fueron figuras de suma importancia en las pesas a nivel nacional”, agrega.

Tales son los casos de la jovencita Eridania Segura, sobrina de la inmortal del deporte de San Pedro de Macorís Eridania Segura Connor, y quien en los pasados Juegos Escolares de Monte Plata conquistó medalla de oro y plata. También está la novel pesista Jazmín Yan, ganadora de oro y plata, y Carmen Chalas, quien se llevó el bronce en el mismo certamen escolar celebrado en 2019. Y las tres tienen el mismo objetivo: formar parte de la selección de mayores dentro de poco tiempo.

“Este es un deporte que me gusta y que le tomé mucho amor. Cuando se suben todos esos kilos, uno dice ‘waoo’ lo pude lograr.
Es mucha la emoción que uno siente”, relata Segura, quien inició en este mundo a los 11 años. La jornada de preparación de estos nuevos talentos se divide en dos tandas. Una que comienza a partir de las nueve de la mañana hasta próximo el mediodía y una segunda que inicia a la una de la tarde y que se extiende por unas cuatro horas.

“Fue en el liceo donde estudio que me escogieron. De eso hace ya dos años. En principio no sabía nada, pero con el pasar del tiempo me fue gustando y hoy nadie me saca de aquí. Trato de seguir avanzando cada día para ser una mejor atleta”, sostiene Yan.

Rutina de preparación en San Pedro de Macorís.

Captación nuevos valores

Desde hace un tiempo, la Asociación de Levantamiento de Pesas de San Pedro de Macorís viene desarrollando un programa de captación de nuevos valores, que incluye presencia en diferentes tipos de actividades que se realizan en varios sectores de la llamada “Sultana del Este”, así como en centros educativos.

“Siempre realizamos exhibiciones de pesas en los barrios con la finalidad de ir reclutando esos jovencitos para traerlos a las pesas y es por eso que este deporte, a través de los años, siempre ha sacado la cabeza por el pueblo y por el país”, dijo Rivera Gómez.

Indica, además, que con el paso del tiempo han podido romper con la idea de que la práctica de las pesas es de “alto riesgo”, en especial los padres de aquellos que querían incursionar en esta disciplina y se los impedían.

“La pesas es un deporte que enamora al ser humano. En la mayoría de los casos cuando comienzan a practicarlo, no lo quieren dejar. Este deporte cuesta mucho trabajo, especialmente en los varones, que prefieren incursionar en el béisbol, pero cuando no ven resultados positivos entonces vienen hasta aquí a que lo preparen”, expresa Rivera Gómez.

Falta de iluminación

La práctica de las pesas en el pabellón, inaugurado en 2008, en horas nocturnas es imposible debido a que malhechores sustrajeron los cables que iluminan las bombillas, por lo que esperan de una pronta solución para seguir fomentando este deporte en San Pedro.

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