«Te besaré y abrazaré siempre con mi alma y mi corazón» con estas palabras se despidió este miércoles la alcaldesa del Distrito Nacional, Carolina Mejía Gómez de su madre doña Rosa Gómez de Mejía, quien falleció el pasado lunes de un infarto.
Mediante un mensaje que su cuenta de Instagram, la funcionaria recordó con una galería de fotos el evento en el que participó junto a su madre en el Museo Trampolín, instituto que fundó la exprimera dama durante su gestión en el período 2000- 2004.
«Estas fueron nuestras últimas fotos. Te besaré y abrazaré siempre con mi alma y mi corazón. En todos quienes te amamos seguirás viviendo. De tu siembra seguiremos cosechando frutos. Te amo Mami», escribió.
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Los restos de doña Rosa fueron sepultados en el cementerio Jardín Memorial en medio de cánticos religiosos, recuerdos nostálgicos y fraternidad familiar.
Su esposo, el expresidente Hipólito Mejía acompañado de sus hijos, nietos y otros parientes cercanos no podía esconder la tristeza por la partida de la exprimera dama.
Durante la misa de cuerpo presente, Ramón Hipólito, hijo mayor de doña Rosa, agradeció a los presentes por acompañarlos en estos dos días y resistir «todo lo que ha pasado».
«Yo nunca me imaginé, aunque sí supe y sabía, que la que siempre conseguía una votación unánime en mi casa y en mi barrio era mi madre, pero jamás me imaginé la alta popularidad, como la gente se volcó para venir».
Mientras que Lissa, la menor de los Mejía Gómez describió a su progenitora como una noble y solidaria mujer.
«Pensar que ya no hablaremos, que no me visitarás en la oficina, que no estarás en tu casa, que no te volveremos a ver ni sentir tus caricias amorosas. Celebro tu vida y el tiempo que estuvimos», expresó.
