Las autoridades del Ministerio Público darán respuesta oportuna sobre la muerte de otros dos jóvenes, que al igual que David de los Santos (cuyo caso ya fue llevado a la justicia) fallecieron tras estar detenidos en distintos cuarteles policiales.
Así lo aseguró ayer la procuradora general de la República, Miriam Germán Brito, cuando fue preguntada sobre cómo van las investigaciones de las muertes de José Gregorio, en Ocoa y de Richard Báez, en Santiago, quienes habían sido detenidos por policías y posteriormente fallecieron sin que hasta ahora se hayan establecido responsabilidades al respecto.
La máxima autoridad del Ministerio Público consideró estos casos como “inhumanos” que “duelen y avergüenzan”.
“Esas investigaciones van en su etapa primaria y no es la época precisa para dar detalles de todo lo que sucede, pero sí pueden tener una certeza, que el Ministerio Público no se va a sumar ni a las explicaciones, que son una falta de respeto a los agraviados, ni tampoco a la permisividad en este tipo de situaciones, eso es una cosa bárbara, inhumana, que duele y avergüenza”, expresó.
Sobre el caso específico del joven José Gregorio, en Ocoa, Germán Brito dijo que se dará una respuesta oportunamente ya que, aunque hubo una primera necropsia, el Ministerio Público mandó a practicar otra con una comisión de tres forenses.
Germán Brito también manifestó, cuando fue abordada por la prensa tras la firma de un acuerdo entre el Ministerio Público y el Tribunal Constitucional, que la reforma policial por la que se aboga en estos momentos el Gobierno central, “es un asunto difícil”, porque se enfrenta a la “cultura institucional” del órgano que se fundó en medio de una dictadura, además de la “natural resistencia al cambio”.
La semana pasada, la procuradora instruyó a la Dirección General de Persecución del Ministerio Público, cuya titular es Yeni Berenice Reynoso, para que coordine con las fiscalías competentes las investigaciones de los casos de ciudadanos que han perdido la vida después de estar retenidos en cuarteles.
