La emprendedora dice que su familia ha sido el motor para echar adelante

Los postres son unas de las preparaciones más comunes y presentes en las reuniones familiares y de amigos. Siempre van acompañados de un café caliente, jugos y hasta espumantes.

Muchas personas consideran estos platillos como el broche de oro, el que da el cierre cuando comparte y consume alimentos, el que es generalmente más ligero que el llamado plato fuerte.

Al darse cuenta de la gran demanda de los postres, en especial los flanes, Katherine González, crea Flankate, un proyecto dedicado a la venta de flanes artesanales que va más allá de lo tradicional.

La joven emprendedora cuenta a elCaribe que la idea del proyecto surgió, en primera instancia, después de que uno de sus amigos le regalara tres moldes para realizar un postre, el cual había intentado años atrás, pero sin éxito.

“Al momento de tener ese regalo ya estaba planeando hacer mis flanes. Empecé a buscar videos en YouTube porque en verdad quería que me saliera el primero con los moldes perfectos, hasta que un día tres jóvenes en esa plataforma, que siempre veo, subieron el paso a paso para elaborar un flan”, narró llena de orgullo.

González expresó que al constatar que la preparación salió perfecta y deliciosa, su emoción fue tan fuerte, que el sentimiento de alegría y de satisfacción la hicieron llamar a sus familiares para mostrarle el resultado obtenido.

Afirma que la perfección de su primer postre era algo asombroso, tanto así que no podía dejar de mirar las fotos que le había tomado cuando lo preparó.

Esta admiración la llevó a que, en el 2019, decidiera vender sus flanes por la plataforma de Instagram.

“Sin pensarlo la subí a mi Instagram personal, el cual convertí en cuenta empresarial para pagarle una publicidad. Sin mentirles, esta obtuvo 625 likes, y muchísimos mensajes directos. Y pensar que yo todavía ni sabía dónde iba a empacar el producto, ni qué precio le pondría”, manifestó la emprendedora.

González, al ver la reacción que generaron las fotos de sus flanes se sintió más animada de empezar su proyecto y estaba expectante de leer los comentarios de los futuros clientes, a quienes ella confiaba que les iban a encantar los flanes.

Sus padres tuvieron tres hijos. La joven mercadóloga es la segunda. Dice que su familia ha sido su motor para salir adelante y emprender Flankate.

Relata que sus parientes la han apoyado al 100 %, afirmando que de ellos ha aprendido los valores de la responsabilidad, honestidad, disciplina y el amor por el trabajo. “Papi y mi hermano siempre han estado ahí. Mis familiares siempre me han dado alas, por eso y muchas cosas más, estoy súper agradecida”, precisa.

La emprendedora califica su infancia como una etapa “caóticamente hermosa”, llena de aventuras y experiencias inolvidables por sus viajes familiares, que le permitieron conocer diferentes partes del país.

Katherine González define Flankate como un proyecto de idea personal de ejecución casera que tiene como principal difusor la publicidad de “boca boca” y la plataforma de Instagram.

De acuerdo con la empresaria, el nombre de Flankate surgió de la combinación de su apodo Kate y la palabra flan.

Para comunicarse con Katherine González, se puede hacer mediante la cuenta de Instagram en @Flankate_ o por el teléfono 829-915-7826.

Explica que los pedidos deben realizarse con anticipación y el pago a través de depósitos a la cuenta personal. “Preparo el flan lo entrego personalmente o vía Uber”, dice.

Sostuvo que el contacto directo con los clientes y la forma de entrega son los elementos que hacen único su negocio.

“Es un negocio casero, la compra y entrega es por contacto online y directo con la dueña, lo cual se revierte en un trato personalizado y orientado primariamente al círculo de amigos y familiares”.

Flanes tradicionales, de auyama, nutella, café, coco, son algunas de las variedades que tiene la empresa.

Buenas referencias

Las referencias han sido el principal soporte para que Flankate tenga el éxito que posee hoy en día. Además de la decoración y su sabor, según indica en la conversación. El tema le apasiona y es buena para conversar. Asegura que sus ingresos han cambiado significativamente, ayudándola a reinvertir en el negocio y lograr mayor rentabilidad.
“Ahora mismo no puedo hablar de una gran ganancia, pero la experiencia me valida cualquier inversión que deba hacer, tener ejecución mercadológica, eso me lleva a un plano de provecho profesional que no tiene desperdicio”, puntualizó. Afirma que las demandas le exigen la ampliación y mayor difusión de Flankate.

Katherine exhorta a los jóvenes soñadores a emprender sin temor, realizando un buen planteamiento de lo que se quiere lograr y proponiendo los elementos que se necesitan. “Responderse a sinceridad o lograr las respuestas adecuadas así como el consejo, apoyo y socios que tal vez sean necesarios. Ese planteamiento y respuestas sinceras rompen el miedo y nos muestran el camino”, recomienda.

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