Santo Domingo. -El Pleno de la Suprema Corte de Justicia juramentó este miercoles a 262 nuevos abogados, durante una audiencia celebrada en la Sala Augusta, en la que se rindió homenaje a la jurista dominicana y combatiente revolucionaria, Hilda Gautreux.
Durante el acto de juramentación, el presidente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Luis Henry Molina, exhortó a los nuevos abogados a tener fe en la justicia y a cuidar la función judicial, porque en sus manos descansa la seguridad del Estado.
Asimismo, el presidente de la SCJ explicó que en la autoridad de jueces y juezas recae la defensa de los seres humanos, porque los derechos que se sustentan en su labor son inherentes a las personas y objeto de interpretación judicial en cada decisión jurisdiccional.
“Las agendas están cargadas del fragor del día a día, de los conflictos en caliente. La sociedad necesita de la distancia crítica suficiente en jueces y juezas. Desde esa distancia es posible ver de manera imparcial y sesuda los conflictos sobre los que les toca decidir. Esa distancia es el marco de la verdadera independencia”, aseguró Molina Peña.
Destacó al grupo de los noveles abogados, a contribuir con su conducta, abonar los valores del bloque de constitucionalidad, comprender el debido proceso como algo sagrado, porque en este descansa la vida, el primer y más importante punto de partida.
Molina Peña dijo estar seguro de que los nuevos profesionales del Derecho se pondrán la toga y serán catalizadores de la Justicia, agentes de las leyes, y ejercerán su carrera con verdadera dignidad.
El magistrado Molina Peña sostuvo es imperativo que los jueces, comprendan el proceso jurídico antes de emitir una opinión que pudiera afectar la independencia.
Asimismo, explicó que “esa realidad no escapa a los medios de comunicación, cuya labor implica hacer un equilibrio entre el derecho a informar y la necesidad de preservar el valor de la institución, y su legitimidad, como garantía de los derechos de todos”.
Hilda Gautreux
Durante la audiencia de juramentación, se rindió homenaje a la abogada Hilda Gautreux, quien con su valentía luchó por la libertad y justicia contra los abusos que se cometían durante la Guerra Civil de abril de 1965.
Su foto recorrió el mundo cargando en mula el cuerpo de una víctima del crimen de Estado. Su trabajo fue muy valioso asesorando legalmente a la resistencia tanto nacional como internacional.
Murió el 15 de junio de 1968, físicamente desgastada y en la pobreza, fruto de la persecución y los maltratos recibidos por la dictadura de los 12 años de Balaguer.
