Andrew Almer, residente de la ciudad estadounidense de Fargo (Dakota del Norte), enfrenta una sanción tras varias quejas de la asociación de condominios donde vive. La comunidad de propietarios asegura que una bandera nacional, colocada por el hombre en el balcón de su apartamento, produce «demasiado ruido» en días ventosos.
Según informan medios locales, Almer fue advertido de que si el problema no se resuelve, enfrentará una multa de 200 dólares por cada día ‘ruidoso’.
«Tienen que estar bromeando», aseveró el hombre. «¿Con todo lo que está pasando en el mundo estos días y esto es de lo que se van a quejar?», agregó.
El residente insiste en que la bandera en el patio es una tradición local omnipresente. «Es algo que siempre quise cuando iba a tener una casa. Tener una bandera estadounidense en el patio es una cosa estadounidense», explicó Almer.
El vecino sancionado ha vivido en el condominio durante cinco años y colgó la bandera en su balcón hace unos dos años. Tras recibir la primera advertencia en enero, se rio y no tomó el asunto en serio. La segunda carta llegó en marzo y el hombre quedó «boquiabierto» al darse cuenta sobre la seriedad del problema.
A pesar de la amenaza, Almer no tiene planes de retirar la bandera, y parece que las reglas están de su lado. En 2005, Estados Unidos aprobó una ley que prohibía a las comunidades de propietarios restringir la colocación de banderas nacionales en los inmuebles.
