Del 1 al 7 de agosto se celebra el Día Mundial de la Lactancia Materna bajo el lema “¡Empoderémonos. Hagamos Posible la Lactancia Materna!”

Hay mujeres que dicen “no voy amamantar porque se me caerán los senos”, otras porque aseguran que es una esclavitud o porque les tienen miedo a que el bebé les muerda el pezón y las lastime. A pesar de esas creencias que sienten algunas madres, la pediatra y coordinadora de Unidad de Cuidados Intensivo Cardiovascular Pediátrico en Cedimat, Carisa Nieves, aconseja a quienes tienen la dicha de amamantar que no pierdan la oportunidad de hacerlo por los múltiples beneficios que brinda este alimento tanto a la madre como al bebé.

“La lactancia materna es el alimento más importante que puede recibir un niño, puesto que lo ayuda en su crecimiento y en su desarrollo saludable”, comenta Nieves. Añade que contiene nutrientes, proteínas, inmunoglobulinas, electrolitos, azúcares, grasas y un efecto inmuno-protector que lo resguarda contra los procesos infecciosos más comunes que se pueden generar en los primeros meses de vida como los virales y bacterianos.

Niños hospitalizados

En todos los niños es importante la leche materna, pero destaca que en los que están hospitalizados tiene un rol preponderante.
“Nosotros promovemos la lactancia materna también con nuestros infantes que están internos; que están acabados de operar del corazón y entubados. Ellos, a las pocas horas ya están consumiendo la leche materna por sonda”.

De acuerdo a la pediatra, éstos niños progresan de manera rápida y efectiva gracias a la leche materna, esto por ser proveedora de factores inmunológicos y nutricionales, que les ayudan a responder de la mejor manera a los medicamentos.

Tiempo de lactancia

Aunque lo ideal es que la madre lacte al bebé hasta su primer año de vida, Nieves señala que estamos inmersos en una sociedad en el que la mujer tiene que trabajar y se le hace complicado mantener la lactancia durante tanto tiempo, sin embargo, aclara que es posible. “Si no puede mantener la lactancia por el primer año de vida, lo aconsejable es que sea hasta los seis meses”, indica.

“Antes de incorporarse a su trabajo debe iniciar un banco de leche. Este consiste en extraer la leche en casa e irla guardando y congelando. Tiene que identificar las botellas con la fecha y la hora de la extracción, de forma que el bebé siga recibiendo su alimento”, puntualiza la especialista.

Aclarar dudas

Para que la madre comience a entender lo indispensable que es la leche materna para ella y el bebé, desde que está embarazada, el ginecólogo o el pediatra debe transportarla y guiarla hacia esos primeros días después que nazca y a cómo va a enfrentar el nacimiento; a conocer la posición apropiada para que el bebé se coloque en el seno y ella esté alerta sobre las molestias que puede sentir. Cuando se presente ese primer contacto entre la madre y el niño, todo va a fluir de la mejor manera posible, asegura la galena.

¿Cómo saber si el niño está bien alimentado?

La lactancia materna no tiene horarios. El bebé puede comer cuando quiera y cuanto quiera, dice. “Dependiendo de la edad del bebé, si es prematuro o a término, succionará lo que él necesita”.
Asimismo, explica que los pediatras y las madres se dan cuenta si el bebé está bien alimentado cuando hay una adecuada ganancia de peso que va a variar de acuerdo a los días o meses de nacido de la criatura”, comenta Nieves.

Posted in EstiloEtiquetas

Más de gente

Más leídas de gente

Las Más leídas