Señor director: Como una acción de asesoría gratuita, sugiero a los aspirantes a posiciones electivas de mando y dirección, para las elecciones nacionales y generales del año 2020, principalmente a los aspirantes a la Presidencia de la República, que incorporen a su lenguaje, a su léxico, un repertorio de palabras y expresiones, a ser usadas constantemente en sus discursos, en su accionar, como las que van a continuación: Dios, amor, patria, paz, libertad, fe, perdón, lealtad, cordura, reforestar, esperanza, equidad, reconciliación, sostenibilidad, transparencia, justicia, tolerancia, participación, confianza, energía limpia, reciclar, economía verde, no rencores, no corrupción, no impunidad, no uso plásticos desechables. Agréguele todas las que usted considere y que vayan en la misma dirección. Pues como puede apreciarse fácilmente todas ellas, más que palabras con un significado, son expresiones que encierran conceptos, criterios, valores y principios. No debiera estar sujeto a ningún tipo de discusión las muchas guerras, los millones y millones de seres humanos que pasan hambre y sufren todo tipo de injusticias, vejámenes y calamidades en el mundo. Que ante la tanta violencia y criminalidad, la tanta convulsión que vive el mundo hoy día, a nosotros debe interesarnos mayormente la República Dominicana. Que todo esto, señoras y señores, es producto de la falta de amor, de fe, de esperanza. Es producto de la intolerancia, de las injusticias. Es producto de nuestro alejamiento de Dios. Obviamente, mi invitación o sugerencia no es solo al discurso, a la teoría. No es a que se aplique un accionar y una conducta demagógica, engañosa. Es que vayamos a la práctica, es que vayamos a la conjunción de la teoría con la práctica. Es que vayamos a la praxis.
José Vicente Calderón R.
Periodista
Embajador se despide
Señor director: Me dirijo a usted a los efectos de saludarle y poner en conocimiento que mi misión como Embajador de Israel en República Dominicana finalizará el 31 de julio del año en curso. Al despedirme deseo agradecerle el apoyo y cooperación recibidos durante mi estadía en su país, y la amistad con la que me ha honrado. Estoy por volver a mi país. Sepan que con todo mi sentimiento y modesta capacidad, hice todo cuanto pude por incrementar la compresión y el conocimiento mutuo entre República Dominicana e Israel, países tan lejanos físicamente pero con muchas cosas en común. El Estado de Israel sigue con simpatía e interés esta democracia y la libertad de expresión y prensa que vive República Dominicana, y por supuesto que florecerá en cada elección y en cada participación del pueblo; en el fortalecimiento de sus instituciones y en la prosperidad de su gente.
Espero que las excelentes relaciones entre su periódico y la Embajada continúen estrechándose, y aprovecho para reiterarle la consideración de mi personal estima.
Con estima,
Daniel Saban
Embajador de Israel
