Hoy, por mandato de la Ley No. 139-97, es el feriado que correspondería a este miércoles Día de los Trabajadores. Esa ley, que pone en segundo plano fechas dominicanas emblemáticas, contribuye a que se pierda la memoria histórica del pueblo, que incluye costumbres y tradiciones. Además de ser exclusivamente patronal, con una inspiración que difícilmente refleje la práctica y estilo de vida de los legisladores que la aprobaron, los que para justificar que los feriados sean solo lunes o viernes se fijaron únicamente en no desorganizar el “ritmo laboral”. Senadores y diputados fueron permisivos a conveniencia, porque relegaron las efemérides de nuestros héroes y mártires, no así las fiestas religiosas, por lo que aparentemente para ellos tiene más peso la Iglesia católica que la Patria.