El aguerrido equipo de Las Águilas Cibaeñas se llevó la corona del Campeonato de Béisbol Invernal dominicano con la gallardía que lo caracteriza.
Su combate, siempre adelante, y con la iniciativa propia de los vencedores, fue sostenido y sistemático, con entusiasmo incomparable.
Llevaron su juego con buen ritmo, tanto en la serie regular, durante el Todos contra Todos, hasta la batalla final, en la cual se impusieron con apremio, con una ofensiva incesante, que escasamente daba lugar para que le cerraran las entradas con “contabilidad de preprimaria”. Siempre hacían lo necesario para mantener el asedio.
Sus acompañantes de la cadena amarilla sazonaron cada inning con vigoroso aplomo, con un alto sentido de respeto por los competidores.
En la arena del deporte lo esencial es compartir. Nunca zaherir ni elevar el entusiasmo al paroxismo.
Las vigorosas Águilas del Cibao levantaron su vuelo bien alto. Pelearon con dignidad para llevarse la corona: Las felicitamos con entusiasmo.
Ahora viajan a México a defender la bandera tricolor. Allá tienen que ganar con igual empeño, con el calor y el estímulo de todos los dominicanos.
Manuel Salvador Gautier
Más conocido como educador universitario y profesional de la arquitectura, Manuel Salvador Gautier acaba de ser escogido como Premio Nacional de Literatura por la Fundación Corripio, con el acompañamiento del ministerio de Cultura.
El reconocimiento es una sorpresa, porque le llega a un hombre que develó su tránsito por la literatura cuando ya rondaba los 63 años, “algo tarde” como dirían algunos críticos convencionales, para entregarse a la carrera de escritor.
Sin embargo, a partir de su primer trabajo conocido: “Tiempos para héroes”, novela, 1993, entra en el mundo de los elegidos, muy lejos de la academia habitual.
Se puede decir, calladamente, su obra está ahí: más de una docena de novelas, cuentos y ensayos.
Felicitaciones.