El valor de la estabilidad

El presidente de la Asociación de Industrias República Dominicana (AIRD), Celso Juan Marranzini, dijo durante una entrevista que “en República Dominicana

El presidente de la Asociación de Industrias República Dominicana (AIRD), Celso Juan Marranzini, dijo durante una entrevista que “en República Dominicana debemos valorar la estabilidad macroeconómica y el crecimiento económico sostenido que hemos tenido y aprovechar esa estabilidad para tomar medidas que conduzcan a mejorar los sectores productivos”.

Esa declaración se produjo al comentarle la desaceleración del crecimiento económico, que, reconoció, se produjo bajo el influjo de factores externos y por una “tensión interna fuera de lo normal que hacía tiempo no se veía”. Más adelante observó que la prolongación de las tensiones políticas pudo también afectar el clima de confianza en el país.

El empresario probablemente estaba centrado en el impacto de los factores políticos en las actividades económicas, desde una perspectiva empresarial. Sin embargo, su afirmación tiene un tremendo sustrato social y político.

¿Acaso los dominicanos valoramos en su justa dimensión el clima de gobernanza llevadera que en las últimas décadas ha primado?
Hablamos de la estabilidad política, sin desconocer que el avance de los pueblos no está al margen de eventos o coyunturas difíciles, que pueden convertirse en amenazas a los propósitos superiores. Y requiere un grado de responsabilidad de todos los actores sociales y políticos.

Con la estabilidad política se crea una base esencial para estimular a los inversionistas a iniciar una empresa en un país. Hablamos entonces de confianza, otra palabra clave que estuvo presente durante la conversación entre Marranzini y Circe Almánzar con ejecutivos de elCaribe.

Mantener la gobernanza en los términos en que ha venido ocurriendo en la República Dominicana es clave para continuar avanzando en la lucha contra los grandes lastres y sentar las bases para la mejoría económica de la nación.

Probablemente estamos comentando lo que tantos otros han dicho una y otra vez, pero no está de más recordar a los dominicanos que los avances innegables en el desempeño económico se fundamentan en la gobernanza llevadera con cierta paz.

Claro que deben mejorar muchísimas cosas, como la seguridad pública, servicios como la electricidad y el transporte, mejorar la confianza en la administración pública mediante más y más transparencia.

En fin, avanzar confiados en que el trabajo bajo el imperio de la ley siempre dará frutos.

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