Las autoridades del Ministerio de Interior y Comunidades Territoriales de Haití (MICT) hicieron una magnífica contribución a la tranquilidad transfronteriza con el comunicado del pasado martes, en el cual hablan con propiedad sobre los terrenos donde organismos de la República Dominicana levantan infraestructuras para mejorar el tránsito, la seguridad y la migración entre los dos países.
El documento, clarísimo y bien estructurado, no deja lugar a ninguna duda sobre la cuestión limítrofe y envía el mensaje adecuado a sus conciudadanos que presumían que una parte del territorio de Carrizal, en Elías Piña, pertenece a Haití, y temerariamente resistían la construcción de obras dominicanas.
“El Ministerio del Interior y Comunidades Territoriales (de Haití) recuerda a la gente del país y a todos los interesados que los dos Estados que comparten la isla han acordado la frontera entre los dos territorios, desde tratados, acuerdos y convenios de revisión de la frontera del 21 de enero de 1929, del 27 de febrero de 1935, del 9 de marzo de 1936, así materializados por escrito”.
Las autoridades del Ministerio del Interior tuvieron la presteza de informar a su población que “ya estaba en marcha una investigación administrativa y técnica para establecer la ubicación de las infraestructuras dominicanas en la base de las controversias. Del mismo modo, se realizó un análisis de los levantamientos cartográficos geo-localizados y la verificación de las referencias geográficas, con respecto a la línea de la frontera entre los dos países. De manera similar, se enviaron emisarios gubernamentales de los Ministerios del Interior, Defensa, Asuntos Exteriores, el Comité Interministerial de Planificación Territorial (CIAT) y el Centro Nacional de Información Geoespacial (CNIGS)”.
“De acuerdo con los primeros resultados de estos estudios, las infraestructuras dominicanas en cuestión, ubicadas entre las terminales RH / RD 181 y RH 182, están en el lado “este” de la línea fronteriza, es decir, en el territorio dominicano”.
Las autoridades haitianas actuaron con propiedad y precisión. Pusieron las cosas en cada sitio, instruyeron a sus subalternos de Belladère sobre la situación, para que cumplan con sus obligaciones en la frontera. Asimismo, reafirmaron su compromiso en defender la integridad de su territorio.
Celebremos la claridad de la actuación haitiana. Contribuyó a la paz.
