A propósito de considerarse a septiembre como el mes de la lucha contra la lepra, el Instituto Dermatológico Doctor Huberto Bogaert Díaz presentó la campaña “Tu piel, mi piel” con el objetivo de redoblar la educación, el control y diseñar nuevas estrategias para erradicar esta enfermedad.
La lepra es una afección de la piel causada por el bacilo Mycobacterium leprae, que se transmite por microgotas de la nariz y boca de personas contagiadas.
Se trata de una patología que acompaña a los seres humanos desde los albores de la civilización hasta nuestros días, y de la que se tienen registros muy antiguos, incluso desde antes de que la Biblia fuera escrita.
Pese a los avances de la medicina actual y del conocimiento que se tiene de este mal, todavía tiene una prevalencia de 0.24 por cada diez mil habitantes, lo que representa menos de una persona, de acuerdo con los indicadores de los organismos internacionales.
Sin embargo, persiste la propagación de la lepra por diferentes factores, entre ellos la urgencia de atender otras pandemias y otras patologías que resultan más letales, como el sida, el covid o la malaria. Otra causa suele ser el diagnóstico tardío, casi siempre por descuido, porque se trata de un enemigo silencioso del que se tiene noticia cuando ya está muy avanzado.
Precisamente en los países donde los sistemas de salud son débiles, donde grandes segmentos de la población viven hacinados en bolsones de pobreza, la propagación de esta enfermedad es más factible.
Estas son algunas de las razones por las que el Instituto Dermatológico Doctor Huberto Bogaert Díaz está desarrollando esta campaña que incluye operativos médicos, jornadas científicas y capacitaciones, y que tiene que ser apoyada por toda la población.
La prevención debe ser la principal prioridad ante esta afección, por el prolongado tiempo con que las personas la sufren, casi siempre en soledad, porque un diagnóstico temprano la puede curar y librar a los que la padecen de la discriminación y de la manera lenta, pero enormemente dolorosa, con que avanza en el organismo hasta incapacitar a las personas.
