En todas las sociedades y a lo largo de la historia de la humanidad las mujeres han sido siempre dadoras de vida, protectoras de su entorno inmediato y de sus respectivos grupos familiares.
Pero siempre hubo mujeres capaces de dedicar su tiempo a trabajar por los demás, a enfrentar realidades difíciles y dolorosas situaciones de vulnerabilidad, a través de iniciativas que merecen el apoyo de todos, y merecen destacarse porque desafían la adversidad, porque se empoderan para empoderar a sus comunidades.
Ellas no buscan notoriedad en los medios, sino más bien sentar presencia en sus respectivos entornos a través de su trabajo y de su fuerza de voluntad para aportar soluciones a problemas que aquejan a miles de personas de escasos recursos.
Se trata de mujeres que tienen la capacidad de transformar nuestro mundo, y así es como identifica el Banco BHD a un grupo de diez de ellas que llevan años entregadas a promover transformaciones positivas en sus respectivos ámbitos y en la sociedad.
La entidad financiera acaba de celebrar la octava edición del premio “Mujeres que Cambian el Mundo”, con el que distingue a estas damas que, de manera silenciosa y sin estridencias, se ocupan de cambiar precisamente aquello que puede servir para mejorar la vida de mucha gente.
Altagracia Filpo, fundadora de la Federación Provincial de Productores y Campesinos Azuanos, recibió el primer premio, Milka Santana, creadora de un laboratorio que brinda formación a niños y niñas en inteligencia artificial y robótica en Monte Plata, y Angy Carolina Estévez, fundadora de CAME, un centro de atención a embarazadas, sin fines de lucro, obtuvieron el segundo lugar.
Cada una de las diez iniciativas gestionadas por mujeres que merecieron el reconocimiento otorgado por el BHD tienen el sello de una gestión enfocada en el ser humano, en la gente que tiene poco o ningún acceso a oportunidades de educación, a gestionar adecuadamente su producción agrícola, a la atención durante el embarazo en casos de chicas adolescentes y de escasos recursos, por citar solo estas tres.
Saludamos la octava edición de este premio, y agradecemos a todas y cada una de las mujeres que, desde sus respectivos ámbitos, dedican una parte de su tiempo a trabajar por los demás, a brindar su apoyo a quienes lo necesitan, y hacemos votos para que su ejemplo se multiplique y sus esfuerzos fructifiquen en la construcción de un mundo más humano.