Recibimos con agrado el “acuerdo por una educación de calidad” suscrito entre el ministro de Educación Antonio Peña Mirabal y la presidenta de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP)Xiomara Guante. Es un hecho importante para las familias que tienen sus hijos en el sistema escolar público.
El compromiso tiene la intención de mejorar la calidad de la educación, lo que es mucho. Sin embargo, trasciende como una garantía de paz en las escuelas, un ambiente sin el cual no se puede alcanzar ningún objetivo serio.

Este es el segundo acuerdo suscrito entre el Estado y servidores públicos profesionales. Ya está en marcha otro con el Colegio Médico Dominicano (CMD). Significa que avanzamos hacia una cultura de diálogo, que supone una alta rentabilidad social.

En esa perspectiva, se puede hablar de madurez. La dirección de la ADP pasada estaba bajo el control del partido de gobierno, sin embargo, fue incapaz de propiciar una relación constructiva con el Ministerio. Ahora, cuando el gremio está encabezado por una visión de raíz opositora, se logra lo que no fue posible entre oficialistas. Eso indica que estamos ante un empeño verdadero por la educación. Esperamos no equivocarnos.

El acuerdo tiene como eje central la calidad educativa, pero contiene ocho componentes que fortalecen la base operativa del sistema que las partes convienen en mejorar, tanto en lo que tiene que ver con las condiciones socioeconómicas de los maestros, como los propósitos de ejercicios continuados para mejorar su formación.

El acuerdo sienta las bases para que el año escolar, y hacia el futuro, el sistema educativo, funcione sin los traumas que conllevan las suspensiones de clases, que jamás tendrán “causas justificadas”.

Privilegiar el diálogo como instrumento para la solución de las diferencias y construir acuerdos para no afectar los procesos educativos, es un magnífico compromiso.

¡Eso es! Lo otro, empeñarse más allá de las aulas para involucrar a las familias, sería otra clave que compete especialmente al Ministerio. Un plan de extensión escolar, desde las escuelas hacia los hogares y las familias, sería un propósito sobre el cual habría que pensar o soñar.

De cualquier manera, han dado un paso hacia adelante.

Posted in Editorial

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas