Nuestro cuerpo se componen de cinco sentidos, oído, tacto, gusto, vista y olfato, cada uno percibe algo diferente de un mismo escenario, cada percepción se almacena en la mente y es guardada como un recuerdo. El oído es el sentido conformado por el equilibrio y la audición, es tan poderoso que cambia pensamientos y atrapa corazones.
Dios dijo que la fe viene por el oír y el oír de Su palabra, donde prestes tus oídos puede radicar tu fe, si escuchas la maldad serás seducido y arrastrado por ella y si escuchas “La Verdad” serás atrapado y salvado por ella.