Tal cual aquella impresionante e inolvidable imagen del sueño del profeta Daniel, de una estatua con los pies de bronce mezclado con barro, del mismo modo muchas relaciones son una mezcla de verdades conviviendo con realidades que las contradicen, sentimientos que queman una parte del pecho mientras la cabeza enfría y procesa frases y situaciones. Hay decisiones a las que no les ha llegado su momento pero palpitan en la agenda mientras se aproxima la hora. Mientras “ser” es oro y “estar” es barro las uniones se van desintegrando con el paso del tiempo. Pero cuando “ser” es barro y estar es “oro” la unidad se va a deshacer tan pronto los intereses acaban. Hoy día las relaciones caducan cuando muere el amor pero el funeral es para los vivos.

Posted in Rosas para el alma

Más de opiniones

Más leídas de opiniones

Las Más leídas