Se debió hacer hace mucho tiempo, ahora estamos a la puerta de la mayor transformación del mundo como lo conocemos por el desarrollo de la Inteligencia Artificial. Recortar los gastos es positivo pero el verdadero ahorro lo aportaran las máquinas; por supuesto con enorme costo político. Muchas empresas se van a dar cuenta que más del 60% de sus empleados no trabajan, no son eficientes ni productivos y que con las herramientas de la inteligencia artificial se aumenta su productividad y ganancias en un 200% sin tener que pagar cesantía. Ese impacto se reflejará en el Estado. Los gobiernos tendrán que despedir a muchos trabajadores.