Los dominicanos celebraron ayer el Día de los Padres profesando amor y respeto por sus progenitores
Durante la conmemoración del Día de los Padres, ayer, centenares de personas acudieron a los cementerios Cristo Redentor y al Cementerio Nacional Máximo Gómez a rendir respeto y profesar amor por sus progenitores. Similares escenas se vivieron en otros camposantos de los municipios de la provincia Santo Domingo.
En los camposantos se vivieron expresiones de tristeza y melancolía por parte de hijos que acuden a orar y a poner un ramo de flores en la tumba de su ser querido.
Desde hace 20 años, Hilario Ureña visita todos los años la tumba de su padre en el Cementerio Maximo Gómez.
“Doy gracias a Dios por habérmelo dado, y ojalá que me dé la oportunidad de que cuando yo parta de este mundo, esté junto a mi viejo”, dijo Ureña.
Durante un recorrido por el camposanto, elCaribe encontró familias orando, encendiendo velas, colocando flores y en algunos casos limpiando las tumbas y nichos donde descansan sus seres queridos.
En el Cementerio Cristo Redentor la afluencia de personas era menor
Como cada año, vendedores abarrotaron la entrada de ambos cementerios ofertando flores, velones, fósforos y otros productos.
Rosa María Pineda, quien vende flores en el Cementerio Maximo Gómez, dijo que la venta nunca ha sido muy buena el Día de los Padres.
Sin embargo, asegura que a pesar de todo se ha estado “picando” con los dolientes que visitaron el cementerio en el día de ayer.
Julio Nazario Ortiz, destacó la limpieza de las manzanas del cementerio.
“Este año, no solo vemos un cementerio más limpio, sino que los familiares de los difuntos podemos sentirnos más seguros, porque hay mucha vigilancia policial”, dijo Ortiz.
En el cementerio Cristo Redentor, el flujo de visitantes era menor, sin embargo en la entrada del camposanto se registró un aumento de las ventas de flores, velas y fósforos.
Las hermanas Miladys y Gloria Jiménez, viajaron desde el municipio de Jarabacoa, provincia de La Vega, para orar en la tumba de su progenitor en este Día del Padre.
“Este es un día especial, mi hermana y yo aprovechamos cada año y venimos desde Jarabacoa para venerar a nuestro padre, que desde hace tres años nos dejó y se encuentra sepultado en este cementerio. Me mata la melancolía de no tenerlo cerca”, dijo Miladys Jiménez con los ojos llenos de lágrimas.
Comercio
Desde el pasado sábado, las tiendas de la capital empezaron a animar sus ventas con motivo de la celebración del Día de los Padres.
Sin embargo, según buhoneros, el flujo de clientes no se asemejaba ni remotamente con el que se registra cada año con motivo del Día de las Madres.
Cerca del mediodía, en las tiendas de la avenida Duarte y del sector Villa Consuelo, vieron incrementada la presencia de clientes en busca de un regalo para los padres, figurando carteras, zapatos y celulares como los artículos más demandados por los compradores.
En las grandes plazas comerciales figuraban entre los artículos más buscados sofás, colchones para camas, ropa, televisores y aires acondicionados.
Muchos clientes se quejaron de los altos precios y de la falta de ofertas con relación al Día de los Padres.
Propietarios de grandes tiendas de la avenida Duarte aseguran que la celebración del Día de los Padres no refleja una variación significativa en las ventas con relación a los días normales de la semana.
“Decimos esto en razón de que la mayoría de los hogares dominicanos son monoparentales dirigidos por una mujer. La presencia del padre en más del 70 por ciento de los hogares dominicanos es un total desconocido, la gente no tiene arraigo por regalarle. Eso incide en que el día del padre se venda menos que un fin de semana de quincena”, dijo Manolito Fernández, directivo de la Asociación de Comerciantes de la avenida Duarte.
