BÁVARO. Los candidatos presidenciales del Partido Revolucionario Moderno, Luis Abinader, y de la Fuerza del Pueblo, Leonel Fernández, expusieron aquí, sus respectivos planes de gobierno hacia el sector.
Son planes tendentes a modernizar, multiplicar la producción y convertir al país en una verdadera potencia exportadora, según expusieron en el Primer Congreso Nacional de Productores Agropecuarios.
Ambos candidatos fueron recibidos por la directiva de la Confederación Nacional de Productores Agropecuarios (Confenagro), encabezada por su presidente de, Eric Rivero, y Geanilda Vázquez, presidenta del Comité Organizador del importante evento, realizado el fin de semana en el hotel Bahía Príncipe.
Participaron representantes de cientos de asociaciones de productores, clusters de especialidades, profesionales de la agropecuaria y ex ministros de Agricultura.
El primero en exponer fue Leonel Fernández, quien dijo que para implementar sus planes primero que nada reorganizaría los Consejos Regionales de Agricultura, incorporando a representantes de los productores. Dijo que convertiría al Instituto Agrario Dominicano en un instrumento de desarrollo rural y relanzaría el casi desaparecido Instituto Nacional de Estabilización de Precios, como gran ente de comercialización, aumentando de 40 mil a 60 mil millones el financiamiento aliando los esfuerzos del Banco Agrícola, el Bandex y otras instituciones crediticias, con especial enfoque hacia los pequeños y medianos productores. Por otra parte, se refirió al potencial exportador del país, que consideró hoy desaprovechado, estableciendo una estrecha coordinación de acciones entre la Asociación Dominicana de Exportadores, el Centro de Exportaciones e Importaciones y otras instituciones públicas y privadas.
Mientras, Abinader acogió como consigna el lema de Confenagro “sin producción no hay nación”, señalando que hacía falta una institución como esta, que representara la voluntad y aspiraciones de los productores.
Abinader detalló sus principales planes de gobierno, con especial énfasis en el relanzamiento de la asistencia técnica, el aumento del financiamiento y la ampliación de la red de cabales de, caminos vecinales y otras obras de infraestructura. Asimismo, prometió erradicar las importaciones “impulsadas por un sector anti agrícola”, que hoy alcanzan más de tres mil millones de dólares, en desmedro de los productores nacionales.
Puso como ejemplo el caso de Constanza, otrora centro de una gran producción de ajo, “hoy prácticamente destruida por las importaciones de más de 290 mil quintales, con valor superior a los mil millones de dólares”.
