WASHINGTON D.C. – Una controversia ha estallado en Washington tras la enérgica condena de la Casa Blanca a una nueva aplicación móvil, ICEBlock, diseñada para alertar sobre la presencia de agentes de inmigración. Esta crítica contrasta fuertemente con el silencio oficial respecto a plataformas ultraconservadoras que incentivan la denuncia de inmigrantes indocumentados a cambio de recompensas. La situación subraya una “doble vara” en la política migratoria y la supervisión tecnológica del gobierno estadounidense.
La portavoz de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, arremetió contra CNN por una entrevista a Joshua Aaron, creador de ICEBlock, calificando de “inaceptable que una importante cadena promueva una aplicación que fomenta la violencia contra los agentes del orden público”. ICEBlock permite a los usuarios reportar avistamientos de agentes del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) y posibles redadas, permitiendo que otros usuarios en un radio de 8 kilómetros reciban alertas automáticas. Joshua Aaron, con más de dos décadas en tecnología, creó la aplicación porque la política de deportación le recuerda a la Alemania nazi, sintiendo que “la historia se está repitiendo”. La aplicación ya cuenta con más de 20.000 usuarios, principalmente en Los Ángeles, una ciudad afectada por redadas masivas.
El director interino de ICE, Todd Lyons, también criticó duramente ICEBlock, calificándola de “repugnante” por “poner en la mira a los agentes federales” y advertir sobre un aumento del 500% en las agresiones contra sus agentes. Lyons afirmó que la publicidad de la aplicación “incita a la violencia”. Sin embargo, Lyons no abordó las denuncias de uso excesivo de fuerza por parte de agentes de inmigración, incluyendo videos de incidentes que involucran incluso a ciudadanos estadounidenses.
El Silencio Ante ICERaid y Otras Plataformas Anti-Inmigrantes
Mientras tanto, la Administración del presidente Donald Trump ha mantenido un notable silencio sobre otras plataformas que activamente promueven la denuncia de posibles inmigrantes indocumentados. Entre ellas destaca ICERaid (Recompensas por Participación y Crowdsourcing de Inteligencia para la Inteligencia y la Defensa Estadounidenses), lanzada en enero.
Esta plataforma incentiva a los ciudadanos a denunciar “actividad sospechosa” o información relevante para la seguridad nacional, particularmente dirigida a inmigrantes indocumentados, a través de la captura de imágenes o videos. Los informantes reciben premios en criptomonedas (tokens de la aplicación), que pueden canjearse por otras criptomonedas o convertirse en dinero real una vez verificada la información.
ICERaid ganó notoriedad cuando Enrique Tarrio, exlíder de la organización de extrema derecha Proud Boys, anunció a mediados de mes que sería el “zar” de la plataforma. Tarrio, de raíces cubanas y encausado por el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 (y posteriormente indultado por Trump), fue elegido por su “amplia red” de contactos y experiencia. Actualmente, no se ha aclarado el número de usuarios de ICERaid ni el origen de los fondos para las recompensas.
La Herramienta Tecnológica de ICE para Redadas Masivas
Aunado a esto, ICE estaría utilizando una nueva aplicación de mapas interna, inicialmente conocida como Alien Tracker o Atrac, que permite a los agentes migratorios visualizar zonas del país con un gran número de personas bajo órdenes de deportación. Este software mapea a nivel nacional la ubicación de inmigrantes con órdenes de deportación y permite localizar a aquellos con ciertas condenas penales. El desarrollo de esta herramienta contó con la ayuda de miembros del Departamento de Eficiencia Gubernamental y fue parte integral de las propuestas del multimillonario Elon Musk para ayudar al Gobierno Trump a adelantar su política de redadas masivas.
La disparidad en la respuesta de la Casa Blanca a estas aplicaciones subraya una polémica política migratoria, donde la crítica se enfoca en las herramientas de protección de la comunidad migrante, mientras que se tolera o ignora el uso de plataformas que incitan a la denuncia y persecución, y se desarrollan herramientas internas para facilitar redadas masivas.