EFE.- Entre señalamientos cruzados de las autoridades sanitarias del enclave, que calificaron el acto de «masacre», y el Ejército israelí, que asegura que las muertes fueron provocadas por una «estampida y atropello por parte de camioneros gazatíes», el mundo respondió con una total condena.
Israel niega cualquier responsabilidad. Este hecho hace perder la esperanza en un alto el fuego.