Bruselas, (EFE).- Los líderes europeos se comprometerán este jueves a ofrecer «compromisos de seguridad» a Ucrania a largo plazo, según el borrador de las conclusiones de la cumbre de dos días que iniciarán mañana en Bruselas al que tuvo acceso EFE.
«La Unión Europea y sus Estados miembros están preparados para contribuir, junto con sus socios, a futuros compromisos de seguridad con Ucrania, que le ayudarán a defenderse a largo plazo, disuadir actos de agresión y resistir esfuerzos de desestabilización», recoge el texto.
No existe aún consenso entre los Veintisiete sobre en qué consistirán estas garantías, pero «se trata de una señal política clara» de apoyo a Kiev, reconoció una fuente diplomática.
La UE iniciará así un debate a dos semanas de la cumbre de la OTAN en Vilna, en la que la discusión se centrará en las garantías de seguridad y la futura adhesión a la Alianza que el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha pedido a la organización militar.
Los jefes de Estado y de Gobierno, de hecho, iniciarán mañana la cumbre con una reunión con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.
Por la tarde -ya sin Stoltenberg- mantendrán una videoconferencia con Zelenski, durante una cumbre en la que abordarán también las consecuencias que puede tener el motín del grupo Wagner, el pasado fin de semana.
En la discusión sobre Ucrania, los jefes de Estado y de Gobierno buscarán también fórmulas para utilizar los fondos congelados del Banco Central Ruso para la reconstrucción del país, un asunto espinoso en el que existen incógnitas legales sobre cómo llevarlo a cabo.
INMIGRACIÓN
La migración, que lleva en la agenda de los líderes de la UE desde la cumbre extraordinaria celebrada el pasado febrero, será de nuevo uno de los principales temas del Consejo esta semana.
El optimismo por el acuerdo logrado a mediados de junio entre los países sobre el reglamento de gestión de asilo y migración y el de los procedimientos de asilo, dos de las principales piezas del Pacto europeo de Migración y Asilo, se ha visto eclipsado en las últimas semanas por las amenazas de Hungría y Polonia.
Ambos países votaron en contra de ese acuerdo, que fija un cupo de solicitantes de asilo reubicados y obliga a pagar 20.000 euros por migrante no aceptado.
Varsovia ha anunciado que intentará bloquearlo por todos los medios a su alcance y para ello está intentando aglutinar a todos los socios del bloque comunitario descontentos.
No se sabe «hasta qué punto» llegarán esas quejas, «si querrán influir en el debate o bloquear las conclusiones» que los mandatarios europeos tienen previsto aprobar durante la cumbre, según fuentes diplomáticas.
En relación con la reforma migratoria, que quiere impulsar la cooperación con los países de origen y tránsito de la migración, se hablará también sobre Túnez.
«Nuestro objetivo es que nuestra actual iniciativa con Túnez sirva como modelo para otras asociaciones similares en el futuro», dijo la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, en una carta dirigida esta semana a los líderes europeos.
Las instituciones se han propuesto aprobar el Pacto europeo de Migración y Asilo, presentado por la Comisión en 2020, antes de las elecciones europeas de 2024.
CUMBRE UE-CELAC
Además de migración, los líderes tienen previsto tratar los preparativos de la cumbre entre la UE y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), del 17 y 18 de julio, con la intención de renovar y reforzar una asociación entre los dos bloques no se vuelva a congelar a ese nivel durante otros ocho años sino que «se desarrollen hitos en una hoja de ruta» en acciones concretas en ámbitos de interés común, incluidos el comercio y la inversión, según fuentes diplomáticas.
Se espera también que los líderes apoyen la aceleración del proceso de adhesión a la UE de los Balcanes Occidentales, y que llamen a las autoridades de Serbia y Kosovo a que rebajen tensiones.
Los Veintisiete también prevén apoyar el refuerzo de la presencia de la Unión Africana (UA) en los foros internacionales, en particular en el G20, y pedirán que se reanuden las negociaciones para una solución global al problema de Chipre con Turquía.
ECONOMÍA Y CHINA
Ya el viernes, el debate girará sobre la competitividad económica del bloque, en especial en un momento en el que todas las potencias mundiales, sobre todo Estados Unidos y China, se están posicionando para liderar los avances tecnológicos vinculados a la transición ecológica y digital.
Los líderes conversarán también sobre la estrategia para la seguridad económica de club, que Bruselas ha presentado recientemente con Pekín en el punto de mira. De fondo queda el debate sobre el futuro de las reglas fiscales, que los Veintisiete quieren cerrar antes de que acabe el año.
