El juicio de fondo que se le sigue al sindicalista Arsenio Quevedo y otros imputados, acusados de integrar una supuesta banda de sicarios, llegará el lunes a su fase final, cuando los familiares de las víctimas sean oídos por los jueces del Segundo Tribunal Colegiado del Distrito.

Ayer, los abogados querellantes, el Ministerio Público y la defensa de los imputados, concluyeron sus discursos finales con las réplicas y contraréplicas, en el que cada una de las partes reiteró lo que habían defendido durante el transcurso del proceso, ante los jueces del Segundo Tribunal Colegiado del Distrito.

Los abogados de las víctimas, Manuel Soto Lara y David Ortiz, reiteraron que de las 65 pruebas presentadas, 35 inculpan a los acusados y demuestran que Quevedo y el exregidor por Pedro Brand Erickson de los Santos Solís eran los cerebros de la supuesta red que también, dicen, integran Amauris Cabrera, Cristino Batista y Danilo Octavio Reynoso, como gatilleros.

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