Aunque su naturaleza es reivindicar a los maestros, ha servido de impulso político-partidario para sus dirigentes

Al inicio o final del año escolar es cuando más frecuentemente se escucha mencionar la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) en los medios de comunicación por reclamos o reivindicaciones para el sector magisterial sin embargo, este gremio mayoritario, tiene un poder que va más allá de las aulas.

Con más de 110 mil miembros activos, un subregistro de jubilados que podría alcanzar las 30 mil personas, la ADP es un mecanismo de cogobierno que está presente en todas las instituciones estatales que tienen que ver con el sistema educativo inicial, básico y secundario, pero también tiene representación en los distintos poderes del Estado ya que una gran cantidad de sus miembros son legisladores, funcionarios designados por el Poder Ejecutivo, alcaldes, directores de juntas municipales, regidores y vocales.

“La ADP es la viva expresión de la unidad en la diversidad; es decir, aquí conviven y coexisten todas las fuerzas del pensamiento político dominicano, gente de derecha, gente de izquierda, gente de centro izquierda, en fin, están aquí y todos convivimos”, expresó Julio Canelo, secretario general del gremio y exviceministro de Administración Pública.

Juega un papel a nivel político sindical en el cual, a capa y espada, se defienden entre sí, sin importar que su presidente pertenezca o no al partido de Gobierno, porque el dirigente que se “tuerce” o que cree que puede manipular a los maestros por situaciones políticas, “se jodió”, considera Canelo.

Aunque no tiene entre sus miembros a los maestros que laboran en el sector privado, la ADP tiene representación en el Consejo Nacional de Educación, Consejo Nacional de Instituto Nacional de Bienestar Magisterial (Inabima), Consejo de la Administradora de Riesgos de Salud Para Maestros (SEMMA), Consejo del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil (Inabie) y Consejo de Instituto Nacional de Formación y Capacitación del Magisterio (Inafocam).

Sin embargo, no cabe dudas de que a quienes han estado al frente del organismo, les ha ido muy bien en términos de función pública o reconocimiento social: Ivelisse Prats Ramírez, Melanio Paredes, Eduardo Hidalgo, Radhamés Camacho, Rafael Santos Badía, María Teresa cabrera, Enrique de León, Xiomara Guante, Conrado Matías, Celio Guerrero, Sigfredo Cabral, Hilario Jáquez, Olimpia González y Eduardo Cuello, son la muestra del liderazgo surgido de la base magisterial.

Un coctel de partidos

Prats Ramírez fue la primera presidenta del gremio y llegó a ocupar funciones como diputada por el Distrito Nacional, presidenta del Partido revolucionario Dominicano (PRD), ministra de Educación y al momento de su muerte fungía como directora del Instituto de Formación Política José Francisco Peña Gómez.

Ella, al igual que Rafael Santos, hoy director del Instituto de Formación Técnico Profesional (Infotep), exsuperintendente de Seguros y exmiembro del Parlamento Centroamericano (Parlacen), figuran entre los dirigentes del Partido Revolucionario Moderno (PRM) que han emergido del gremio cuando pertenecían al PRD.

Melanio Paredes, además de ser ministro de Educación, fue ministro de Industria y Comercio, director de la Autoridad Portuaria y director del Infotep, en tanto que Radhamés Camacho y Eduardo Hidalgo, este último presidente actual del gremio, han sido electos diputados. Camacho fue presidente de la Cámara.
Paredes, Camacho e Hidalgo son miembros del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en organismos tan importantes como el Comité Político y Central.

“El tú destacarte en la lucha social y gremial o el arte, es un aval para que tú puedas tener seguidores en una elecciones, tener votantes a tu favor. Es decir, que eso no es solamente en la ADP eso es en toda la vida. Ahora, en la ADP, los maestros tienen un alto nivel de participación política, porque los dirigentes de la ADP, desde la base hasta su dirección, son personas que además de ser militantes sindicales, fueron y son activistas políticos”, dijo de Enrique León, exsecretario general de la ADP.

Pese a ese poder, unos 2480 dirigentes, sin contar los tres o cinco representantes que tienen en cada escuela del país, De León describe que los maestros son sumamente celosos de la independencia de su sindicato con respecto a los gobiernos y la administración de la gestión del Ministerio de Educación.

Explicó, además, que a veces la dirección de la ADP quiere tirar para un lado pero los maestros de una determinada provincia o de un municipio no están de acuerdo, entonces se impone el criterio de la base.

El sindicalismo no se juega

“El interés que tienen los partidos cuando llegan al poder de querer controlar la ADP va a tener siempre una oposición y la oposición será siempre radical. Nosotros como institución, independientemente de que un partido está en el gobierno y coincida con el presidente o presidenta de la ADP, nosotros no nos vamos a variar en eso y ya nosotros tenemos ejemplo”, dice con orgullo Julio Canelo, al referirse a la administración de Andrés Navarro y Roberto Fulcar en el Ministerio de Educación.

La naturaleza de este gremio es la reivindicación de los maestros. ¡Y vaya que lo han logrado! Sus luchas, exteriorizadas mediante manifestaciones públicas y paro de docencia, les permite exhibir al día de hoy que cuentan con un ARS para los maestros, un clínica privada para los docentes, un sistema de pensiones propio y ahora el Instituto Dominicano de Evaluación e Investigación de la Calidad Educativa (Ideice) desde donde no solo se dará capacitación a los docentes, sino también que funcionará como un espacio para el fortalecimiento sindical. “La ADP es una escuela de la democracia. Hay sus luchas, naturalmente, y sus contradicciones, pero hay espacio donde resolver esas contradicciones”, continuó diciendo su secretario general, al destacar que los procesos electorales de quienes van a ser dirigentes permite que la gran mayoría de fuerzas políticas que compiten queden representada en el Comité Ejecutivo Nacional.

De León, en su calidad de exsecretario, reconoce que las luchas internas nunca la ha fraccionado, porque su lema es “unidad en la diversidad” y por lo general, dice, los maestro han preferido elegir un presidente lo más independiente al gobierno de turno, como una manera de resguardar la lucha por sus reivindicaciones.

Cooperativa y resort

Aunque no surge directamente de la Asociación, los maestros dominicanos pueden exhibir una de las cooperativas más activas del sistema financiero nacional: Cooperativa Nacional de Servicios Múltiples de Los Maestros, (Coopnama) que ofrece servicios de ahorros y créditos, no solo a los maestros y personal administrativo de las escuelas del sector oficial, sino también al Ministerio de Educación e instituciones afines como el Infotep, el Consejo Nacional para la Niñez (Conani), los pensionados del sector educativo, el Ministerio de Cultura, el Departamento de Atención a la Primera Infancia y a sus empleados. Un activo de la cooperativa es el resort Coopmarena, ubicado en la zona turística de Juan Dolio del cual pueden disfrutar los docentes y público en general.

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